Con 71 votos a favor, 21 en contra y 1 abstención, el Senado de la República aprobó la propuesta para regular la presencia y actuación en México de personal de agencias policiales extranjeras, en el marco de los convenios y programas de cooperación bilateral suscritos por el Estado mexicano que contribuyan a preservar la seguridad nacional.
La mayoría de los senadores de oposición votaron en contra, entre ellos el panista Damián Zepeda, quien criticó la iniciativa que envío el lunes pasado al Senado el presidente Andrés Manuel López Obrador y, a 48 horas “y sin consultar a expertos”, se tiene que aprobar por una mayoría “irresponsable”.
Señaló que se trata de un tema de gran relevancia que tiene dos grandes peligros: el empoderamiento de la Secretaría de Relaciones Exteriores y la subordinación de los estados y municipios al Gobierno federal.
Con la aprobación, las embajadas y misiones extranjeras acreditadas en el país deberán informar por conducto de la Secretaría de Relaciones Exteriores los hechos de que tengan conocimiento en el desempeño de las funciones derivadas de los convenios y programas de cooperación bilateral suscritos por el Estado mexicano en materia de seguridad y que contribuyan a preservar la Seguridad Nacional.
La Secretaría de Relaciones Exteriores, previo acuerdo con las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana, de la Defensa Nacional y de Marina, resolverá sobre la acreditación y la circunscripción territorial del agente extranjero.
El coordinador de la bancada de Morena, en el Senado, Ricardo Monreal, aseguró que la Ley “no tiene una dedicatoria especial” para un país o una agencia, sino que busca trabajar con todas las representaciones que se encuentra en México y denunció que desde hace 100 años no se tiene regulada la presencia de agentes extranjeros en nuestro en nuestro país, sólo se sabe que, en el caso de la DEA, existen 11 oficinas, pero se desconoce el el número de elementos.
Al presentar algunas reservas, Monreal destacó que, en un hecho que no tiene precedente, “hemos dejado de regular en un siglo a los agentes extranjeros sin saber qué y cómo hacen su trabajo en nuestro país”.
Elogió al jefe de Ejecutivo federal al señalar que “no hubo un presidente que se atreviera a proponer un ordenamiento jurídico como este. Deberíamos de aplaudirle al presidente Andrés Manuel López Obrador, porque es un hombre digno, que defiende la soberanía del paños y les pidió a todos votar por unanimidad. Ponerse a la altura de cualquier paños del mundo y someter a los agentes a las leyes mexicanas cuando lo hacemos nosotros cuando vamos a Estados Unidos, es digno de un aplauso”, remató el morenista.
No obstante, la legisladora panista, Alejandra Reynoso se cuestionó: “No entiende si Marcelo Ebrard es el secretario de Relaciones Exteriores o es el vicepresidente de México”, mientras que su compañera de bancada, Guadalupe Murguía recalcó que se le asigna a la SRE un amplio control en el manejo de información confidencial, lo cual es un despropósito.
“Es improbable que los agentes estadounidense acepten compartir información sensible con funcionarios que no han pasado por un control de confianza”, subrayó.
Con la aprobación de la reforma, el gobierno mexicano tendrá la facultad para controlar, quitar inmunidad y hasta podría expulsar a los agentes como la DEA, ICE, FBI, CIA, entre otras, que no se sujeten a la ley mexicana, argumentaron los senadores de Morena y Encuentro Social antes de avalar el dictamen.
La senadora Eunice Romo, de Encuentro Social, afirmó que se trata de una propuesta responsable, necesario, obligatoria. “Estoy segura que, aún con un Parlamento Abierto, estas vocease no acompañarían la propuesta, a veces solo buscan hacer eco”, sentenció.