Secretaría de Salud asegura que no habrá límite presupuestal para vacuna

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El secretario de Salud, Jorge Alcoer, afirmó que el gobierno de México no tiene un límite de presupuesto para adquirir las vacunas contra el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 y adelantó que se hará lo necesario para tenerlas en el país.

Durante la conferencia vespertina de autoridades de salud, el funcionario federal dijo que aún no se tiene un estimado de lo que podrían costar las vacunas en el país, aunque comentó que podría tener un costo fijado a los países con renta media, que iría de entre 7 a 10 dólares, de acuerdo con lo establecido por la Coalición para las Innovaciones en Preparación de Pandemias (CEPI).

Añadió que se ha tenido acercamiento con CEPI y la Alianza Global de Vacunas e Inmunización (Gavi) para acceder a las vacunas, aunque afirmó que no se ha definido a cuáles podría acceder el país.

Alcocer afirmó que hay 25 vacunas en fase clínica y 141 en fase pre-clínica, de las que la de Sinovac, las dos que elabora el Instituto de Productos Biológicos de Wuhan con Sinopharm y la de la Universidad de Oxford en conjunto con Astraseneca son las más avanzadas.

Comentó que los desarrolladores están trabajando con las cepas más agresivas del virus SARS-CoV-2 y advirtió que aún no se tiene certeza de si las vacunas generarán inmunidad y por cuánto tiempo, por lo que reiteró que se vigilará que las vacunas sean seguras, pese a la inmediatez con la que necesitan.

Adelantó que la Organización Mundial de la Salud ha establecido que las vacunas serán distribuidas de tal forma que se pueda vacunar al 20% de cada país, priorizando a personal de salud, adultos mayores de 65 años y adultos con comorbilidades.

 

(Con información de Milenio)

Las elecciones mexicanas a prueba

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En el 2021 se renovarán 15 gubernaturas, 30 Congresos locales, la Cámara de Diputadas y Diputados y los Ayuntamientos en 30 estados. Estas elecciones implicarán la movilización de cerca de 96 millones de electores y la elección de alrededor de 3,500 cargos de elección popular. Los números no son la principal prueba de las elecciones mexicanas. El enemigo a vencer el año próximo es un microscópico e inesperado jugador: El virus SARS-CoV-2 y la enfermedad que produce, COVID-19.

El efecto del virus en las elecciones se ha sentido en todo el mundo. Del 21 de febrero al 23 de junio de este año un total de 66 países y territorios han decidido posponer sus elecciones (IDEA Internacional 2020b). El INE, por su parte, aprobó en abril pasado la suspensión de los procesos electorales locales y pospuso las jornadas electorales de Coahuila e Hidalgo (INE 2020) y ahora mismo delibera cuál sería la mejor fecha para la reanudación de actividades electorales.

No sabemos a ciencia cierta cuál será el comportamiento del virus y de la enfermedad. Sin embargo, lo que sí parece ser aceptado por los especialistas es que el SARS-CoV-2 llegó para quedarse por mucho tiempo. Por tanto, resultaría catastrófico para la democracia mexicana no prever cómo impactará en las elecciones que tendremos en México el siguiente año.

Una prueba a la que nos enfrentaremos es el probable escenario de un rebrote del letal virus. Siendo este el supuesto: ¿Deberíamos continuar con las elecciones bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria o deberíamos posponer su celebración? Las respuestas dependerán desde luego de la gravedad y la dispersión de los casos y, al tratarse de elecciones locales, es probable que este dilema deba resolverse de forma muy focalizada o regional; no obstante, pensemos que la situación de emergencia sanitaria se dé de forma generalizada en todo el país. Desde mi perspectiva, las únicas elecciones que no pueden postergarse indefinidamente son las de la Cámara Baja del Congreso de la Unión y las de los Congresos Locales. Esto es así porque no existen normas constitucionales que resuelvan el problema de que a la fecha del inicio de las Legislaturas no estén realizadas la elecciones correspondientes y no haya órganos legislativos qué instalar, como sí las hay para la suplencia de Ejecutivos Estatales y de Ayuntamientos. En todo caso, prever una solución a este problema implica una reforma constitucional urgente que contemple de forma expresa la posibilidad de postergar elecciones y, respecto de los Congresos, el supuesto de que los cargos de las personas legisladoras actuales puedan extender su vigencia hasta la celebración de las nuevas elecciones, siempre que las condiciones sanitarias lo permitan. La postergación de las elecciones no es una decisión sencilla, particularmente si se considera el efecto que esto pueda tener sobre la legitimidad del resultado electoral (IDEA Internacional 2020a: 3). Más aún si esta determinación proviene del Consejo General del INE y su legitimidad es cuestionada por el titular del Ejecutivo Federal.

Otra prueba para las elecciones en México será la simplificación de algunos procedimientos electorales para evitar movilizaciones masivas de personas que aceleren los contagios, dentro de los márgenes que permite la barroca y detallista ley electoral; y con una condición jurídica agravante: La regla de que las reformas electorales substanciales deben estar publicadas al menos tres meses antes del inicio del proceso electoral (art. 105, fr. II CPEUM). Para el caso de la elección para renovar las 500 Diputaciones Federales, el tiempo ya está formalmente agotado, como declaró recientemente el Dr. Lorenzo Córdova, Consejero Presidente del INE (https://twitter.com/lorenzocordovav/status/1272254528297943042?s=20).

Al SARS-CoV-2, sin embargo, no le interesan las reglas constitucionales. De no posponerse las elecciones en el país, éstas deben llevarse a cabo con estrictas medidas de seguridad e higiene sanitarias. Es en este sentido que, si no se modifican las leyes electorales para poder gestionar procesos electorales en medio de la pandemia, la norma de la veda legislativa (art. 105, fr. II CPEUM) deberá interpretarse de forma abierta para armonizarla con la protección de la salud y la vida de las personas electoras para que se permita, idealmente, que los Congresos reformen las leyes electorales, incluso ya iniciado el proceso electoral, y se simplifiquen los procedimientos electorales para hacer frente a la emergencia sanitaria.

La simplificación de los procedimientos electorales debe partir de dos premisas: i) La armonización de los derechos políticos de electores, partidos, candidaturas, ciudadanía y medios de comunicación con los derechos a la salud y a la vida de las personas; y ii) la búsqueda de medidas que reduzcan al máximo posible la movilización y la aglomeración de grandes cantidades de personas durante las etapas del proceso electoral.

Para enfrentar la pandemia hay desde luego muchas actividades y procedimientos electorales que deben adecuarse. Considero que los siguientes son cruciales: Las campañas electorales, la jornada electoral y los cómputos electorales.

Respecto a las campañas electorales, se trata tal vez de una de las etapas con mayor movilización de personas, porque si bien existen medios virtuales y redes sociales para la comunicación político-electoral, no hay campaña electoral en las democracias que no implique la movilización de cientos de personas en mítines, cierres de campaña, actos de registro de candidaturas, etcétera. Más allá de la idea de las campañas virtuales, la prueba consistirá en que las normas y las disposiciones sanitarias deberán reducir al mínimo el número de personas que sean permitidas en los actos de campaña. No prohibición, sino regulación desde el mirador del derecho a la salud. No obstante, estas disposiciones no serán eficaces sin la aceptación y cumplimiento por parte de partidos políticos y candidaturas.

Por lo que hace a la jornada electoral, la prueba es mayúscula. Si mantenemos exactamente de la misma forma los procedimientos para la integración, la capacitación y el funcionamiento de las mesas directivas de casilla, y la forma en que votamos, aun el sentido común permite prever altos riesgos de contagios en las casillas durante la jornada electoral y en los días de la capacitación de las y los funcionarios de casilla. Si no tenemos las capacidades legales y tecnológicas para implementar el voto electrónico, lo menos que debemos hacer para superar esta prueba será establecer horarios específicos a fin de que las personas electoras, de conformidad con su letra inicial de su primer apellido, acudan específicamente en dicha franja de horario a emitir su voto. 

Otras opciones: ¿Votar en jornada electoral anticipada?, ¿votar a través del servicio postal?, ¿votar desde los coches?, ¿votar en los hospitales? Probablemente, pero se requieren adecuaciones legislativas y amplios consensos políticos.

Por último, nuestros arcaicos métodos de cómputo electoral, incluidos los recuentos totales producto del trauma político del 2006, no deben ser igual a lo que hemos hecho en los últimos 25 años. Para armonizar los derechos de las personas y partidos contendientes con el derecho a la salud, sólo puedo imaginar una solución utópica pero eficaz: La renuncia del derecho a recuentos totales o parciales en sede administrativa por parte de los actores políticos y, únicamente en el caso de que existan causas y pruebas de alguna irregularidad, ejercer ese derecho de forma acotada en los tribunales electorales. 

Para superar los riesgos que representa la pandemia para las elecciones del 2021, lo ideal sería que se realicen modificaciones a las leyes electorales con la aprobación unánime de los partidos políticos. Si esta habilitación legislativa no acontece, aún contamos con un margen estrecho para que las autoridades administrativas electorales ejerzan una interpretación creativa de las normas jurídicas, es decir, el INE y los OPLEs aún podrían ejercer sus márgenes de discrecionalidad interpretativa para flexibilizar los procedimientos electorales, sin embargo, para ello se requiere que tales decisiones sean política y presupuestalmente viables.

Posponer las elecciones no es la mejor de las soluciones, debido a que implica una afectación al principio constitucional de periodicidad de las elecciones (Comisión de Venecia 2020: 19). Sin embargo, debemos de estar preparados incluso para este escenario, porque si las condiciones sanitarias empeoran en el país, probablemente esta sería nuestra única salida, siempre que valoremos el impacto que la suspensión de elecciones tendrá en la estabilidad política y social de nuestra democracia. 

Si el desarrollo de la pandemia permite la celebración de las elecciones en el 2021, la prueba mayor será potenciar la creatividad de las y los legisladores y de los organismos electorales, porque deberán idear y gestionar procedimientos electorales novedosos que trasciendan los cauces tradicionales bajo los cuales hemos conducido nuestras elecciones hasta ahora. 

En cualquier caso, la variable que transforme una prueba en un éxito histórico será el apoyo unánime de los partidos políticos.

Referencias bibliográficas

Comisión de Venecia. (2020). Report – Respect for democracy, human rights and the rule of law during states of emergency, reflections, taken note of by the Venice Commission on 19 June 2020 by a written procedure replacing the 123rd plenary session. CDL-AD(2020)014. Estrasbugo: Comisión de venecia.

IDEA Internacional. (2020a). Elecciones y COVID-19. Documento técnico de IDEA Internacional 1/2020. Estocolomo: IDEA Internacional.

IDEA Internacional. (2020b). Panorama global del impacto del COVID-19 en las elecciones. (Actualizado al 23 de junio del 2020). En: https://www.idea.int/es/news-media/multimedia-reports/panorama-global-del-impacto-del-covid-19-en-las-elecciones (Consultado el 25 de junio del 2020).

INE. (2020). Resolución del Consejo General del Instituto Nacional Electoral, por el cual se aprueba ejercer la facultad de atracción, para efecto de suspender temporalmente el desarrollo de los procesos electorales locales, en Coahuila e Hidalgo, con motivo de la pandemia COVID-19, generada por el virus SARS-CoV2. México: INE. 

COVID-19 ya estaba en España un año antes de estallar la pandemia, revela investigación

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El COVID-19, que ha infectado a más de 10 millones de personas en el mundo ya estaba en España un año antes de que se declarara la pandemia, este 11 de marzo de 2020.

De acuerdo con EFE, la Universidad de Barcelona (UB) detectó el Sars-Cov-2 en muestras de aguas residuales que se recogieron en esa ciudad española el 12 de marzo de 2019.

En un comunicado, la casa de estudios señala que el resultado de la investigación probaría que el coronavirus circulaba mucho antes de que se tuviera constancia.

Los expertos de la Universidad de Barcelona (UB) estudiaron cada semana muestras obtenidas de dos plantas de tratamiento de aguas residuales de la capital regional de Cataluña, bajo la premisa de que existen grandes cantidades de genoma de coronavirus en las heces.

El coordinador del trabajo, Albert Bosch, comentó que los niveles de genoma Sars-Cov-2 coincidieron claramente con la evolución de los casos de COVID-19 en la población.

Sin embargo, se señala, encontrar la presencia del virus antes de que se diagnosticaran casos demuestra que muchos infectados del nuevo coronavirus podrían haber sido confundido con enfermos de gripe en los servicios de atención primaria sanitaria.

Bosch señala que “haber detectado la difusión del Sars-Cov-2 con un mes de anticipación habría permitido una mejor respuesta a la pandemia”.

Este sábado, 27 de junio, la región de Madrid anunció que vigilará 300 puntos de la red de aguas residuales, 45 en la capital de España, para detectar el coronavirus, ya que su eliminación por las heces permite conocer de forma precoz su incidencia, como ya están haciendo otros países europeos.

Cabe recordar que fue el 14 de marzo de este año cuando el Gobierno español declaró el estado de alarma y aprobó medidas severas para restringir el movimiento de la población y las actividades sociales y económicas para contener el contagio del Covid-19.

COVID-19 estaba en alcantarillado de Italia dos meses antes de ristras primeros casos en el país: estudio

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El coronavirus estaba presente en los sistemas de alcantarillado de Milán y Turín en diciembre, dos meses antes de que se detectaran los primeros casos de COVID-19 en Italia, según muestra un nuevo estudio.

“Se han encontrado rastros de SARS-Cov-2 en muestras de aguas residuales tomadas en Milán y Turín el 18 de diciembre y en Bolonia el 29 de enero”, dijo Giuseppina La Rosa, quien dirigió la investigación para un estudio del ISS, el instituto nacional de salud del país.

“Se detectaron más rastros en otras muestras durante enero y febrero”.

El informe es parte de una ronda regular de pruebas sobre virología ambiental que el departamento de medio ambiente y salud del ISS ha llevado a cabo desde 2007.

En total, se analizaron 40 muestras desde octubre de 2019 hasta febrero de 2020, y se realizaron 24 pruebas adicionales desde septiembre de 2018 hasta junio de 2019 como control.

Las pruebas hospitalarias en la región costera de Liguria también han indicado la probabilidad de que el virus estuviera presente en el país a finales del año pasado, informaron periódicos italianos.

Los primeros casos de virus informados en el país se relacionaron con un hombre que solicitó tratamiento a mediados de febrero de este año, aunque algunas personas que llegaron del extranjero habían sido diagnosticadas con la enfermedad anteriormente en el invierno.

El nuevo estudio del ISS “puede contribuir a esclarecer la primera fase de la circulación del virus en Italia”, señaló La Rosa.

Los resultados son coherentes con pruebas similares realizadas en aguas residuales en Barcelona y con pruebas clínicas en pacientes hospitalizados en Francia, que mostraron rastros biológicos del virus ya en diciembre pasado.

(Fuente: Bloomberg)

COVID-19 se habría propagado mucho antes de que se conociera el brote en China: Harvard

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Un análisis de imágenes satelitales hecho por la Escuela de Medicina de Harvard sugirió que el coronavirus SARS-CoV-2 podría haberse propagado en Wuhan, China, desde el otoño de 2019, mucho antes de que el brote se informara al mundo.

El estudio se basa en el aumento dramático del tránsito de automóviles alrededor de los cinco principales hospitales de Wuhan a final de verano y principios de otoño de 2019.

El doctor John Brownstein, quien dirigió la investigación, dijo a ABC News que el equipo de investigadores utilizó técnicas similares a las de las agencias de inteligencia y analizó imágenes de satélite comerciales.

Brownstein también explicó que el aumento de tránsito coincidió con elevadas consultas en los buscadores chinos de Internet de “síntomas que luego se determinarían como estrechamente asociados con el nuevo coronavirus”.

El investigador, quien también es director de innovación del Boston Children’s Hospital, dijo que aunque la evidencia es circunstancial, el estudio aportó datos importantes en la búsqueda del origen del Covid-19.

“Algo sucedía en octubre. Claramente, hubo un cierto nivel de interrupción social que tuvo lugar mucho antes de lo que se identificó como el comienzo de la pandemia del nuevo coronavirus”, dijo Brownstein.

El 31 de diciembre, las autoridades de China notificaron a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que un nuevo patógeno respiratorio circulaba en la ciudad de Wuhan, la cual posteriormente se convertiría en el primer epicentro de la pandemia.

(Fuente: Notimex)

¿Y mañana qué?

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Bien dijo Pascal que la infelicidad del hombre se basa sólo en una cosa: que es incapaz de quedarse quieto en su habitación. Hoy nos damos cuenta que habemos muchos muy vacíos de alma; alma que explota en un momento tan complejo como este.

Sabemos que esto terminará, probablemente más tarde de lo que creemos, pero reafirmo que las calles que están hoy desiertas volverán a llenarse, abandonaremos nuestras trincheras de guerra quienes vivimos esto como tal, saldremos con los ojos iluminados de nuevo por luz, una luz diferente a la de las pantallas de celular, una luz verdadera, la que se asoma por tu ventana.

Pero, ¿será acaso que los que saldremos ese día seremos los mismos?, ¿qué tan diferente será el mundo? Hoy sabemos qué pasa, qué hay que hacer, pero ¿y mañana qué?

No es ningún engaño decir que inclusive antes de la pandemia existían voces que nos llamaban a pausar un poco, reflexionar sobre qué habíamos hecho mal como sociedad y qué cambios estábamos obligados a hacer desde diversos ámbitos.

Para crisis podemos poner un sinfín de ejemplos, y cada uno aglomera una serie de enseñanzas, desde los sismos, las guerras… hasta las pandemias. Hoy somos parte, desde mi perspectiva, de la posición de víctima y victimario. Durante décadas hemos inclinado la balanza a una estructura que castiga y agrava las consecuencias de dichas crisis teniendo como prácticas la reducción en el gasto dentro de muchas áreas, esto es parte de las políticas mal-llamadas “neoliberales” (la discusión de porqué digo que está mal utilizada esta expresión será para después).

Vivimos en un país que tan solo este año, de acuerdo al Presupuesto de Egresos de la Federación, ha recortado la inversión pública en la educación (-62%), la salud (-35%), el abastecimiento de agua potable (-11.2%), las comunicaciones y transportes (-17.6%); todo esto SOLAMENTE, repito, de un año a otro. Es increíble que contemos con una representación que tenga una cara hipócritamente de izquierda, con un cuerpo y entrañas “neoliberales“, enflacando cada vez más al gobierno.

A todo esto, y sin tratar de desviarme, mi punto regresa a decir que la pandemia nos ha dejado ver el otro lado de la globalización, un mundo tan conectado pero tan distante, tan cercano pero tan ajeno. Hoy queremos un futuro más parecido al pasado que hoy parece tan lejano.

¿Y mañana?

Lo que sucede hoy ya está, ya sucede y ya es nuestra realidad. Muy seguramente permanecerá ahí por los próximos años, será inevitable no traerlo a colación cada que nos veamos, no nos cansaremos de contarlo a nuestros hijos y nietos en el futuro. Mismo futuro que ya referimos hoy sin saber cómo será.

Están por un lado quienes opinan que este será el fin de una era, fin del capitalismo y la globalización como la conocemos; pero por otro lado están quienes creen que sucederá todo lo contrario, que será no menos que el regreso triunfal de la estructura que no ha dejado de funcionar en por lo menos los últimos 100 años.

Están también quienes creen que este será el inicio de regímenes más autoritarios, pero también quienes creen que se retomará la confianza en la democracia. Los que sueñan con un mañana brillante con una definición de ciudadano mucho más empoderado y los que leen los versículos del Apocalipsis en sus historias de Instagram.

Si me preguntan, he leído de todo, he encontrado argumentos muy sólidos desde varios lados, pero no puedo colocarme dentro de una definición correcta de qué es lo que pasará mañana. No lo sé.

Los cuestionamientos

John Stuart Mill, uno de los primeros filósofos ecologistas y economistas, describió en su libro Principios de economía política (1848) lo que llamaba una “economía de Estado estacionario“, esto como respuesta a lo que podría sustituir el aumento del nivel material como fundamento de la sociedad. Es decir, Mill reconoció el peligro de la sobrepoblación, por lo que la producción y el consumo dejarían de ser objetivo prioritario, ocasionando la reducción en la cantidad de seres humanos. “Un mundo lleno de seres humanos carecería de parejas floridos y de una vida salvaje“, decía. Esta es una de las ideas más utópicas que he leído, no obstante, no hay un fin para el crecimiento y las consecuencias del mismo, tal como lo planteaba en la teoría, ¿es la expansión sostenible indefinidamente? No sabremos de las consecuencias en el cambio climático, en las desigualdades, las rivalidades geopolíticas, en fin.

El enemigo silencioso para nuestra sangre, sudor y lágrimas

Bien dicen que los grandes asesinos de la historia de la humanidad son las bacterias, los virus y lo que han provocado a lo largo de nuestra existencia. Desde el sarampión hasta el sida o VIH. En septiembre del año pasado la Organización Mundial de la Salud publicó un informe en el que alertaba del riesgo potencial que se produjera una pandemia, y cuan profetas 2 meses después surgiría este nuevo coronavirus SARS-Cov-2.

La crisis que vivimos no es financiera, aquí no hay una disputa por dinero en los bancos, no hay una gota que derramara el vaso, pero lo que sí hay es una guerra, y hoy la vivimos; así el 2020 tiene un inicio del conflicto pero no habrá el registro de un fin. Y es que cuando un ser humano se encuentra andando por el estrecho camino de la vida y la muerte, su visión, prioridades, principios y su moral pueden cambiar radicalmente. Hoy no existen.

Una guerra es la que vivimos y hoy las palabras que pronunciaría Churchill no serían contra el fascismo, sino contra un virus y una enfermedad, un enemigo letal y silencioso. Más aún, hoy quedarían fuera de lugar estas frases luego de darnos cuenta cuán diminutos y débiles somos, siendo que el camino y pensamiento antropocéntrico ese momento debe quedar en el olvido. Un humano tiene un valor menor al que imaginamos, tal vez. Aunque dudo cambie nuestro pensamiento en el corto plazo.

Por supuesto, habrá quienes sufrirán más o menos de esta situación. Habrá quienes lo pierdan todo y quienes lo ganen en su lugar.

Somos diminutos

Hablando de cómo se ha vivido esta etapa de confinamiento, hemos sido bombardeados de recomendaciones y concursos de productividad, de libros, series, películas, idiomas que aprender, nuevas habilidades. Ignorando la posición desde la que enfrentamos la situación, suponiendo que todos vivimos en la misma burbuja. Esta competencia solo nos ha provocado una especie de preferencia a ese sentimiento provocado por la saturación de productividad, ante el sentimiento de vacío. Es decir, antes muero saturado que sólo.

Entre todas estas recomendaciones deberían existir aquellas que te inviten más al autoconomiento, al autocuidado, al manejo de las emociones para quienes nos arrinconamos en la desesperación y la incertidumbre.

Solo pensemos que tal vez debería ser importante saber en un futuro las consecuencias que tendrá esto en nosotros todo. Los casos de ansiedad y depresión que han aumentado, los lentos suicidios que ocurrirán de un tiempo a otro. Toda una generación que será afectada psicológicamente después de estos meses. ¿Qué cambiará en nosotros a la larga?

Entonces, si queremos un futuro diferente no creo que extrañar el pasado sea la mejor idea, ese pasado que hoy vemos tan lejano. Un pasado en donde la única normalidad era la crisis. Una crisis hoy infinitamente más deseable que otra.

Es difícil augurar un futuro preciso teniendo tantas nubes de emociones y pensamientos poco claros en nuestras mentes y lo digo por todos. Hoy no diferenciamos utopías de distopías, sino pánico y miedo de la realidad. Las divisiones que están en nuestro presente son producto de tantas circunstancias que hoy se han destapado por estas cegueras. No nos queda más que darle nombre a lo que vivimos y al cómo lo vivimos: llorar, gritar, escribir, dibujar. Pero todo esto a la vez de informarse y luchar, cada uno desde su trinchera.

La pandemia nos invita a pensar en que existen salidas, tan heroicas como las queramos, de la mano de una bata y un estetoscopio. Dignas de personajes épicos es que se está librando una batalla donde las armas las tienen quienes están en el frente de batalla. Donde lo único que tenemos nosotros, los no indispensables, es un litro de alcohol en gel, otro de whisky, un rollo de papel de baño y muchas horas de Netflix. Tal vez estamos obligados a pensarnos colectivamente, cooperativa y solidariamenteexigiendo una nueva realidad para todos. Pero no, hoy somos incapaces de quedarnos en casa, cuan ególatras y débiles que somos.

Lo que queda claro es que algo se quebró fuertemente en nuestro modo de existir y emergen así oportunidades para pensar y pensarnos distintos. Por un largo tiempo los abrazos y los besos, tan necesarios como son, tendrán que esperar, tendremos que ser distantes, pero no por ello deberá suceder menos amor.

Entonces… ¿y mañana qué? Supongo que por el mañana nos preocupamos después. Hoy solo queda citar de nuevo a Pascal y señalar lo infelices que somos por ser incapaces de quedarnos quietos en cuatro paredes y esperar que nada vuelva a la normalidad.

Revela Secretaría de Salud actividades esenciales que no pueden parar durante emergencia sanitaria

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El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, enlistó este martes las actividades laborales que no podrán parar durante el periodo de emergencia sanitaria decretado este lunes por el Gobierno federal con la finalidad de contener la dispersión COVID-19.

“Se ordena la suspensión inmediata de actividades no esenciales en los sectores público, privado y social con el fin de mitigar la dispersión y transmisión del virus SARS-CoV-2”, leyó López-Gatell esta mañana en Palacio Nacional.

No obstante, dijo, hay labores que no se pueden dejar de desempeñar porque son indispensables para el funcionamiento de la sociedad en la vida diaria, como la atención médica, la producción y el reparto de alimentos, los servicios de agua y luz, de combustible, y la seguridad pública, entre otras.

En lo que corresponde a la rama médica, el decreto incluye el abasto, servicios y proveeduría de sector farmacéutico, manufactura de insumos, equipamiento médico y tecnologías para la atención de la salud, así como los involucrados en disposición de los residuos peligrosos biológicos-infecciosos, tanto en el sector público como en el privado.

También la limpieza y sanitización de las unidades médicas en los diferentes niveles.

En materia de seguridad pública y la protección ciudadana, así como la defensa de la integridad y la soberanía nacional, la procuración e impartición de justicia, además de la actividad legislativa en los niveles federal y estatal.

Los sectores económicos considerados esenciales son los servicios financieros; la recaudación tributaria; la distribución y venta de energéticos; la generación y distribución de agua potable, la industria de alimentos y bebidas no alcohólicas.

También mercados de alimentos, supermercados, tiendas de autoservicio, abarrotes y venta de alimentos preparados.

Tampoco deben parar los servicios de transportes de pasajeros y de carga, la producción agrícola y pecuaria, agroindustria, química, productos de limpieza, las ferreterías, los servicios de mensajería y las guardias en labores de seguridad privada.

En la lista se incluyen guarderías y estancias infantiles, asilos y estancias para personas de la tercera edad.

Las telecomunicaciones y los medios de información, además de los servicios privados de emergencia, los servicios funerarios y de inhumación, el almacenamiento y cadena de insumos esenciales.

En esta fase se mantendrán la operación de aeropuertos, puertos y ferrocarriles y las actividades cuya suspensión pueda tener efectos irreversibles.

En cuanto al Gobierno, se mantiene la operación de los programas sociales.

En los sectores económicos que mantendrán las labores se pide atender las recomendaciones de no realizar reuniones de más de 50 personas y el lavado de manos constante.

López-Gatell especificó que las medidas se implementarán entre el 30 de marzo y el 30 de abril.

En forma efectiva”, dijo, son 21 días hábiles, entonces también que tengan conciencia de que la reducción de movilidad son 30 días, pero en términos laborales son 21 días”.

Alerta la OMS sobre una aceleración de la pandemia por COVID-19

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La pandemia de COVID-19 “se acelera” pero su trayectoria puede modificarse, estimó este lunes la Organización Mundial de la Salud (OMS), instando a los países a pasar a un etapa de “ataque” realizando pruebas de diagnóstico a todos los casos y poniendo en cuarentena a los allegados de quienes den positivo.

Estima que hasta el día de hoy, se han registrado más de 300 mil casos de contagios por el nuevo coronavirus, “es desgarrador. La pandemia se acelera”, declaró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Sin embargo, considera que aún “podemos cambiar su trayectoria”.

Y es que la enfermedad tardó 67 días en llegar a los 100 mil contagios, 11 más para alcanzar 200 mil, pero cuatro días más tarde se contabilizaron 300 mil casos, informó desde Ginebra, en una conferencia de prensa virtual.

Hasta el momento, más de 16 mil personas han muerto por el coronavirus SARS-CoV-2 y ha contagiado a más de 361 mil personas en 174 países.

La cifra, a pesar de todo, solo refleja una parte del número real de contagios, pues muchos países solo hacen la prueba de diagnóstico a quienes necesitan una hospitalización.

“Pero lo que más importa es lo que hacemos. No se puede ganar un partido de futbol solo defendiendo. Hay que atacar”, aseveró el jefe de la OMS.

“Pedir a la gente que se quede en casa y (establecer) otras medidas de distanciamiento físico son una forma importante de frenar el avance del virus y ganar tiempo, pero son medidas defensivas que no nos ayudarán a ganar”, advirtió.

Reconoce que algunos países tienen dificultades para aplicar esas medidas ofensivas, debido a la escasez de recursos.

Y reclamó que se administren medicamentos a los pacientes infectados antes que la comunidad científica se ponga de acuerdo sobre su eficacia, ya que al usar medicinas que no han sido probadas y cuya eficacia se desconoce puede generar falsas esperanzas y provocar desabasto de medicamentos esenciales para tratar otras enfermedades.

(Fuente: El Mañanero Diario)

China dice tener lista para pruebas en humanos una vacuna contra el SARS-CoV-2, causante del covid-19

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La carrera para conseguir una vacuna contra el nuevo coronavirus, causante de la neumonía covid-19, parece avanzar a velocidad acelerada.

Este martes, el ministerio de Defensa de China aseguró en un comunicado que había desarrollado “con éxito” una vacuna contra el SARS-CoV-2, y que ya había autorizado las pruebas en humanos, aunque no precisó cuándo empezarían.

El anuncio se produjo al día siguiente de que en Estados Unidos se iniciaran los primeros ensayos en humanos de una posible vacuna a la que serán sometidos 45 voluntarios sanos.

De acuerdo con las autoridades chinas, su vacuna fue desarrollada por el equipo de investigación de la Academia Militar de Investigación Médica, dependiente de la Academia Militar de Ciencias.

La epidemióloga Chen Wei, líder de ese grupo de investigadores, afirmó que la misma cumple con los estándares internacionales y las regulaciones locales, y que está lista para “una producción a gran escala, segura y efectiva”.

Pero, esta no es la única vacuna desarrollada en China contra el nuevo coronavirus.

Varias instituciones de ese país revelaron este martes que en abril pondrán en marcha los ensayos clínicos para comprobar la eficacia de varias vacunas en las que han venido trabajando, informó EFE.

Una de estas es una vacuna creada a partir de vectores virales de la gripe que se encuentra actualmente en fase de experimentación con animales y que será probada en abril en un estudio en el que participarán varios centros de investigación junto a las universidades de Pekín, Tsinghua y Xiamen, según el Ministerio de Educación chino.

También en abril se realizarán las pruebas de una vacuna desarrollada en la plataforma mRNA, de acuerdo el subdirector de la Comisión Municipal de Salud de Shanghái, Yi Chengdong.

Por otra parte, el subdirector de la Comisión Municipal de Salud de Shanghái, Yi Chengdong, afirmó que científicos chinos han desarrollado una vacuna en la plataforma mRNA que entrará en ensayos clínicos también en abril. Esta fue creada a partir de proteínas virales derivadas de las proteínas estructurales de un virus.

Además de ser el lugar donde surgió el nuevo coronavirus, China ha sido hasta ahora el país del mundo donde más víctimas ha habido de esta enfermedad, sumando hasta este martes 17 de marzo al menos 3.226 fallecidos y más de 80.000 contagiados.

(Fuente: BBC Mundo)

Alemania reporta un total de 188 casos de infecciones por coronavirus

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Hasta la fecha, se han confirmado 188 casos de infección por SARS-CoV-2 en Alemania.

Este martes se reportaron 31 nuevos casos confirmados de coronavirus en Alemania , lo cual aumentó la cifra a 188, frente a 157 que habían sido reportados el lunes por la tarde, señaló el Instituto Robert Koch (RKI).

Trece de los 16 estados Federales de Alemania han reportado casos del nuevo coronavirus, siendo el estado occidental de  Nordrhein-Westfalen el más afectado, con un total de 101 casos, le sigue Bayern con 35 casos y Baden-Württemberg con 26 casos, según el RKI.  

El RKI destacó que el 93% de los casos tuvieron contacto directo con un caso confirmado o habían estado en áreas de riesgo o provenía de un área con un mayor número de casos. El otro 7% aún sigue siendo investigado.

Hoy en día el país no ha reportado ningún caso fatal del virus.

El Instituto Robert Koch se dedica a la investigación, control y prevención de enfermedades en Alemania. 

 

(Con Información de RKI)