Como luchar contra mi país

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El miércoles pasado se terminaron las clases en algunas preparatorias privadas del Estado, durante el semestre me atrevo a afirmar que les di a mis alumnos herramientas para que lucharan contra las adversidades que el sistema pudiera generarles. Les enseñé que es más importante luchar por lo que creen correcto que dejarse vencer. Les dije que nadie, ni siquiera el sistema en el que nos regimos en México puede determinar lo que quieren hacer con su vida.

Aprendimos durante el semestre que debemos construir un mejor México. Aprendimos que nadie tiene la verdad absoluta y que debemos ser críticos ante todo, a escoger bien sus batallas y que la bandera/causa que decidan tomar la lleven con orgullo siempre. Intenté brindarles herramientas que creí necesarias para su vida, pero nunca tomé la precaución de enseñarles a defenderse de su propio país.

De acuerdo a un estudio realizado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), entre 55 y 62 por ciento de los niños en México sufrió maltrato y según el INEGI, una tercera parte de los hogares mexicanos padece de violencia. Esto se traduce para los niños, en el mejor de los casos en deserción escolar, y es que la violencia infantil es una de las principales causas de muerte en México.

De acuerdo a un estudio realizado por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), entre 55 y 62 por ciento de los niños en México sufrió maltrato y según el INEGI, una tercera parte de los hogares mexicanos padece de violencia.

Miles de niñas, niños y adolescentes en México crecen en un contexto de violencia perpetuada no solo por sus seres queridos sino por el sistema en el que se rige este país. De acuerdo a cifras de UNICEF mueren 2 niños(as) menores de 14 años cada día. Estos niños y niñas sufren de violencia física, psicológica y sexual todos los días, en la mayoría de los casos permanece oculta o es aprobada socialmente. ¿Cómo impacta esto en el futuro? Si logan escapar de la muerte se traduce en violencia de género (ambos géneros se ven afectados).

El abuso infantil es un tema común y normalizado en el país. El 77% de las víctimas de abuso infantil son niñas entre 5 y 7 años. Existe en México una toda una red de trata de personas y de turismo sexual infantil, de acuerdo al Senado de la República cada año son explotados más de 30 mil infantes en ciudades de la Riviera Maya, Cancún, Acapulco, Puerto Vallarta, Guadalajara y Tijuana, generando ganancias por más de 24 mil millones de dólares anuales.

El abuso infantil es un tema común y normalizado en el país. El 77% de las víctimas de abuso infantil son niñas entre 5 y 7 años. Existe en México una toda una red de trata de personas y de turismo sexual infantil, de acuerdo al Senado de la República cada año son explotados más de 30 mil infantes…

Según el estudio Trata en el sector turístico, elaborado por el Observatorio de Violencia Social y de Género de Benito Juárez para la Secretaría de Turismo, “hay paquetes exclusivos para pederastas que incluyen hotel y niño, con costos de 200 a 2 mil dólares”. Luego del turismo y venta de drogas, la explotación sexual infantil es la actividad que más ingresos deja a Cancún. ¿Cómo puede progresar México si seguimos permitiendo estás actividades? ¿Dónde estamos nosotros como sociedad que exige y denuncia? ¿Dónde está el gobierno ejerciendo sus facultades de proteger a todos sus ciudadanos?

La violencia infantil sigue siendo la causa de muchos problemas que tenemos en el país, por qué los desprotegemos. ¿Cómo podemos enseñarles a luchar y cambiar el mundo, si muy pocos los están cuidando? ¿Cómo mejoramos su situación para que puedan ser parte del cambio que México necesita?

¿Qué necesitamos para darnos cuenta que la situación en la que estamos en México es indignante?

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– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

Intimidades Públicas: “Más allá de la #Ley3de3”

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Cuando el hartazgo es sumamente considerable, cualquier solución parece ser suficiente.Esolam

La iniciativa ciudadana denominada como “Ley 3 de 3” está haciendo historia. No sólo junto más de 600 mil firmas ciudadanas para poder ser enviada al Senado de la República institucionalmente como una iniciativa ciudadana, sino también está marcando una agenda ciudadana dentro del ámbito público sin precedentes. En ese sentido, pareciera que no habría porque estar en contra de la “Ley 3 de 3” –que dicho en términos legislativos expide la Ley General de Responsabilidades Administrativas-, cualquier persona con el mínimo hartazgo del ámbito público está a favor de que esta iniciativa ciudadana se haga realidad.

Pero ¿por qué no resulta suficiente la “Ley 3 de 3”? Más allá de que encausa un hartazgo ciudadano hacia un tema sumamente relevante del ámbito público como lo es la corrupción, pareciera que gran parte del fondo se centra en transparentar 3 declaraciones por parte de los servidores públicos y generar incentivos para denunciar actos de corrupción, cuando en la realidad para acabar con la corrupción se requiere mucho más. Con esto, no quiero decir que presentar las 3 declaraciones –patrimonial, intereses y fiscal- esté mal, sólo que vale la pena conocer el contexto general que acontece actualmente en nuestro país respecto a este tema.

…si bien la iniciativa “3 de 3” involucra aspectos sensibles de la ciudadanía, debemos ver que el Sistema Nacional Anticorrupción es un mecanismo integral que modifica como el andamiaje legal actual, para lograr erradicar de una vez por todas eso que la ciudadanía no tolera más: la impunidad.

El año pasado se aprobó la reforma Constitucional que generó las bases para crear lo que se denominó como “Sistema Nacional Anticorrupción”, y que en otras palabras, se refiere a generar un sistema de coordinación con el cual los tres niveles de gobierno tengan los mecanismos legales e institucionales para combatir la corrupción y acabar con la impunidad. Asimismo, dicha reforma Constitucional además de crear estas bases –la Ley General del Sistema Nacional Anticorrupción-, busca crear o modificar otras 6 leyes –la Ley General de Responsabilidades Administrativas, la Ley Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Fiscal Administrativa, la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, la Ley General de Contabilidad Gubernamental, la ley de Coordinación Fiscal y la Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas– con la intención de fortalecer institucionalmente desde todos los ámbitos, es decir, una serie de reformas que generan un sistema integral.

Es importante mencionar que el artículo 108 de la Constitución actualmente obliga a los servidores públicos a presentar su declaraciones patrimonial y de intereses sin excepción. En todo caso habría que incluir en la Ley de la materia –Ley General de Responsabilidades Administrativas- la obligación de los servidores públicos de presentar también su declaración fiscal.

…vale la pena seguir de cerca esta serie de importantes reformas que actualmente están en discusión. Porque de estas discusiones legislativas, no sólo versaran los textos legislativos que brindaran más obligaciones a los servidores públicos respecto a la transparencia y anticorrupción, sino que será un parteaguas en la vida política y democrática de las instituciones públicas

Desafortunadamente el debate sobre la “Ley 3 de 3” se centra en la transparencia de las mismas. Es decir ¿Es realmente necesario que los servidores públicos de forma obligatoria no sólo presenten sus tres declaraciones, sino también las transparenten al escrutinio público? Aquí es donde vale la pena profundizar.

Habrá quienes defiendan el hecho de que al ser un funcionario público tu vida en su totalidad es público, incluido lo que has hecho antes de formar parte de la administración pública. Y habrá quienes digan que con realizar las declaraciones resulta suficiente. A mi parecer, la reforma Constitucional y las leyes secundarias son un sistema que abarca mucho más que 3 declaraciones. Son los cimientos institucionales por los cuales existirá un combate frontal no sólo para combatir la corrupción sino también para prevenirla.

Es por esto, que si bien la iniciativa “3 de 3” involucra aspectos sensibles de la ciudadanía, debemos ver que el Sistema Nacional Anticorrupción es un mecanismo integral que modifica como el andamiaje legal actual, para lograr erradicar de una vez por todas eso que la ciudadanía no tolera más: la impunidad.

Por estas razones, vale la pena seguir de cerca esta serie de importantes reformas que actualmente están en discusión. Porque de estas discusiones legislativas, no sólo versaran los textos legislativos que brindaran más obligaciones a los servidores públicos respecto a la transparencia y anticorrupción, sino que será un parteaguas en la vida política y democrática de las instituciones públicas, y por ende, de los servidores públicos de nuestro país.

En fin, el apoyo a la iniciativa “3 de 3” es importante, pero definitivamente no resulta suficiente.

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Sin confianza, no hay gobierno

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“La confianza es algo que si dejamos que se erosione termina derrumbando al gobierno más poderoso.”
– Stephen M. R. Covey

Del 29 de septiembre al 8 de octubre del presente año, se llevaron a cabo las comparecencias en el Senado de la República de diferentes secretarios con motivo del Tercer Informe de Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto.

Fueron unos días de mucha tensión. Los senadores de todos los partidos políticos, menos el PRI y el Verde, por supuesto, aprovecharon para increparle face à face al gabinete presidencial todo lo que habían ignorado y negado en los medios.

Acudieron a comparecer al Senado los titulares de la Secretaría de Gobernación, de la Secretaría de Educación Pública, de la Secretaría de Relaciones Exteriores, de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y de la Procuraduría General de la República. Pero de entre todas estas comparecencias, la que me pareció más intensa fue la del Srío. Miguel Ángel Osorio Chong.

Lo que hizo a esta comparecencia la más intensa de todas, fue el careo entre el Srío. Osorio Chong y la Sen. Layda Sansores San Román. Me emocionó bastante el discurso de la senadora en la tribuna, en la que increpó muy fuertemente al secretario. Fue un discurso fortísimo, pero increíblemente preciso, atinado, acertado, pertinente y afortunado. Nadie pudo haberlo dicho mejor. Cada segundo de los cinco minutos y medio que duró el discurso, la Sen. Sansores San Román me tuvo asintiendo con la cabeza y aplaudiendo. (Ver el video aquí: Tunden a Osorio Chong en el Senado).

La senadora le reclamó, directo y a la yugular, al Srío. Osorio Chong por la corrupción, por sus mentiras…

La senadora le reclamó, directo y a la yugular, al Srío. Osorio Chong por la corrupción, por sus mentiras, por el nombramiento de Arturo Escobar —el antes vocero del Partido Verde— como subsecretario de Prevención del Delito, por el conflicto de intereses con Grupo Higa, por la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa… y le dijo algo que le debió de haber dolido: “Peña Nieto no lo respeta”. ¡Auch!

La exigencia principal de la Sen. Sansores San Román fue que renunciara. A esta exigencia y a los reclamos mencionados, se unieron los senadores de los distintos grupos parlamentarios. Entre ellos destacando los del PAN, que expusieron pancartas en las que agregaban a sus reprimendas el lema: #SinConfianzaNoHayGobierno.

#SinConfianzaNoHayGobierno. Este lema me pareció excelente porque resume en un hashtag todo lo que representa el gobierno peñanietista: desconfianza.

Este lema me pareció excelente porque resume en un hashtag todo lo que representa el gobierno peñanietista: desconfianza.

Y es una desconfianza generalizada provocada por sus escándalos cada semana de corrupción y de conflictos de intereses, por los delitos cometidos por las fuerzas del Estado, por los asesinatos a periodistas, por la decadencia del peso frente al dólar, por la falta de capacidad intelectual del presidente, por las mentiras históricas fabricadas por los órganos de gobierno encargados de defender la verdad… Esta administración es un verdadero “desgarriate”, citando a la Sen. Sansores San Román, de verdad que “ni cómo ayudarles”.

De acuerdo a una encuesta realizada en agosto del presente año por Grupo Reforma, el 82% de la población desconfía de los partidos políticos, un 70% desconfía de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, un 60% desconfía de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y un 66% desconfía del Presidente de la República. ¿Qué tal?

Es bastante preocupante que las instituciones más importantes de un régimen (supuestamente) democrático como el nuestro tengan altísimos niveles de desaprobación y desconfianza de parte de la ciudadanía. Así, ¿cómo podemos hablar de un Estado de Derecho? ¿Cómo podemos hablar de un verdadero gobierno?

Platicando el día de ayer con la senadora independiente Martha Tagle, quien coincide en el contenido del discurso de la Sen. Sansores San Román, aunque “no en las formas”, me dijo que considera que “el cargo le queda grande a Osorio Chong”. Le pregunté: “En una frase, ¿cómo describirías la administración del Presidente Peña Nieto?” A lo que me contestó: “Ineficiente, negligente y corrupta”.

Le pregunté: “En una frase, ¿cómo describirías la administración del Presidente Peña Nieto?” A lo que me contestó: “Ineficiente, negligente y corrupta”.

Suscribo con la opinión de estas valientes mujeres.

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Fuentes:

• Grupo Reforma. Encuesta nacional de Gobierno y Política. 2015.
• Senado de la República. Versión estenográfica de la comparecencia de Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación, dentro del análisis del Tercer Informe de Gobierno del Presidente de la República: Primera Parte. 2015.
• Aristegui Noticias. Video de la intervención de Layda Elena Sansores San Román en la comparecencia de Miguel Ángel Osorio Chong: en Youtube. 2015

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