El pueblo invencible

Comparte este artículo:

Se respiraba en el ambiente un miedo a que la historia se repitiera. El huracán Wilma, en octubre de 2005, marcó un antes y un después en la historia de Cancún, y de la zona norte de Quintana Roo. Yo personalmente no lo viví, pero sí la mayoría de mis amigos y toda mi familia. La devastación, el caos y la incertidumbre que ese desastre natural trajo es algo que esta gente no quiere volver a vivir jamás. 

La semana pasada, por momentos, el miedo volvió. Delta, que avanzaba directamente hacia nuestras costas, comenzaba a tomar forma de depresión tropical. Al cabo de unas horas, ya era denominada tormenta tropical. Su trayectoria seguía fija. Seguía agarrando fuerza, ahora ya era huracán categoría 1. A nuestras costas llegan tormentas tropicales continuamente, es algo que hasta cierto punto ya tenemos controlado. Pero esta vez pintaba para ser diferente. 

Huracán categoría 2. Las alertas estaban aumentando. El Gobernador ya había ordenado habilitar refugios y se daba a la tarea de informar a la población. Delta no dejaba de fortalecerse. Ni cuenta nos dimos cuando fue categoría 3, porque en cuestión de 20 minutos aumentó a categoría 4, que ya es considerado como un fenómeno potencialmente devastador. El impacto era inminente, y fue ahí donde después de 15 años la gente de Quintana Roo volvió a sentir ese miedo. 

Supermercados al tope de su capacidad. Filas de dos horas en las gasolineras. Madera para cubrir ventanas, agotada en cuestión de minutos. Varios conocidos optaron por irse de la zona. Pegaría en la madrugada, y debíamos estar listos para recibirlo.

Por algún motivo que no podría especificar porque mis conocimientos de meteorología son nulos, el huracán mientras más se acercaba a la costa de Quintana Roo, bajaba de velocidad. Originalmente esperábamos que pegara entre 11 pm del martes y 1 am del miércoles, pero en realidad tocó tierra cerca del amanecer. También perdió fuerza: bajó a categoría 3 en la tarde-noche del martes, y al momento del impacto con tierra, cerca de Punta Maroma, ya era categoría 2.

Delta nos golpeó por varias horas. Vientos fuertes desprendieron árboles del piso, derribaron una cantidad considerable de postes de electricidad y algunos otros daños que, si bien son notables, la situación pudo haber sido mucho peor. Mucho viento pero poca lluvia, lo que hizo que al salir el sol nos encontráramos con una ciudad diferente, bloqueada, apagada, pero sin inundaciones, por lo que los trabajos de recuperación fueron rápidos.

Hasta el momento de escribir esto siguen los trabajos de recuperación de espacios y vialidades, limpieza de escombros y restablecimiento de los servicios básicos. Ha sido de reconocer la labor constante del Gobernador de Quintana Roo y de los alcaldes de los municipios afectados. El Presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó desplegar 5 mil elementos de la Marina y la Guardia Nacional para agilizar la recuperación de espacios, y han sido de gran ayuda. 

Sin embargo, el verdadero agradecimiento tiene que ir para la ciudadanía. Gente de Solidaridad, Isla Mujeres, Puerto Morelos, Cozumel, Benito Juárez y Lázaro Cárdenas que no se dejó vencer. En el instante en el que salió el sol las y los quintanarroenses salieron en brigadas a ayudar en lo que se pudiera. Les veías limpiando camellones, levantando árboles, donando víveres para aquellos más afectados, trabajando por salir rápidamente de este problema que sin duda no nos ganó. 

Hay regiones aún sin luz. Hay zonas que aún necesitan mucha ayuda. Hay todavía trabajo por hacer, pero es admirable lo que Quintana Roo y su gente logró. La cultura de la preparación, de estar listos al momento del impacto, de extenderle una mano a quien lo necesite y sobretodo de unirse ante la adversidad es lo que hace a Quintana Roo un pueblo invencible. Estamos saliendo de pie y de frente, como lo hemos hecho siempre. 

Un orgullo ser quintanarroense. 

Meteoro ilumina el cielo en Monterrey; reportan caída cerca de Ciudad Victoria, Tamaulipas

Comparte este artículo:

El cielo del área metropolitana de Monterrey se iluminó la noche de este martes por unos segundos.

Alrededor de las 22:00 horas en redes sociales se reportó el paso de un supuesto meteorito, que fue captado tanto por personas como por cámaras de seguridad.

“Alguien más acaba de ver un cometa/meteorito pasar por el cielo de MTY? Confirmen”, fue una de las publicaciones que se pudo ver en redes sociales.

Pablo Lonnie Pacheco Railey, miembro de la Sociedad Astronómica del Planetario Alfa, lugar que ya cerró sus puertas, explicó en entrevista para el periódico El Norte, que de acuerdo con lo captado por diferentes cámaras se trató de un bólido, un fenómeno inusual en el Estado.

Un meteorito ocurre sólo cuando el objeto cae en la tierra, dijo.

“Cuando vemos nosotros un fenómeno luminoso, una rayita que cruza el cielo, le llamamos meteoro. Solamente si algo llega a la superficie de la tierra le llamamos meteorito, pero cuando el meteoro es muy brillante, más brillante que todas las estrellas del cielo, y evidentemente este lo fue, le llaman bólido”, señaló.

El también director de astrónomos.org dijo que un bólido se destruye en el aire a una altura de entre 80 y 150 kilómetros de la tierra y es capaz de verse a 150 kilómetros a la redonda.

Tras los hechos reportados en Nuevo León, habitantes del poblado Lázaro Cárdenas, ejido cercano a Ciudad Victoria, Tamaulipas, reportaron la caída de un meteorito, el cual incendió matorrales y arbustos muy cercanos a su domicilio.

Los hechos ocurrieron a las 23:00 horas y hasta el lugar llegaron elementos de Protección Civil y Bomberos del municipio para atender el llamado de los habitantes que quedaron sorprendido ante este fenómeno de la naturaleza.

(Con información de Grupo Reforma y Milenio)

¿Politización de la justicia o judicialización de la política?

Comparte este artículo:

Desde tiempos inmemorables, en nuestro país se ha afirmado que existe una politización de la justicia, por este término referencia a un viejo vicio en el sistema político mexicano que consiste en utilizar los aparatos del Estado para señalar, perseguir o sentenciar atendiendo a incentivos meramente político-partidistas sin importar los fines de la justicia y el derecho, y son sólo para construir narrativas ad hoc a la situación política del momento. Desde Cárdenas, Salinas, Peña Nieto a López Obrador, en distintos episodios históricos y ante periodos complejos y plagados de corrupción, los sucesores de diversos ámbitos ideológicos, han utilizado los efec tos naturales de políticas un asunto para aumentar legitimidad pública y mediática, que no resuelve el fondo del asunto. Esto contraviene la constitución y tratados internacionales en la materia, ya que el ánimo es una rentabilidad en lugar de la búsqueda de la justicia sustantiva. 

Armando Regil Velasco escribió en el 2015: “México es un país de muchas leyes y poco estado de derecho”, y esto viene a colación ante la constante selectividad de la rendición de cuentas. El caso Lozoya es ejemplo de esto, a pesar de las reformas que generaron el Sistema Nacional Anticorrupción así como diversas modificaciones jurídicas e institucionales para su operación, esto ha tenido pocos resultados. En este asunto de gran trascendencia nacional, al estar ante un innegable caso de corrupción de la empresa Odebrecht y su influencia en reformas que la habrían beneficiado,  somos testigos de cómo las redes sociales, los medios de comunicación y el debate público, se han convertido en el lugar donde se están señalando involucrados, construyendo presuntas teorías del casos, desahogando pruebas y dictando sentencias. 

Filtraciones de documentos, filtraciones de videos de exfuncionarios recibiendo fajos de miles de pesos en efectivo y hasta de familiares del mismo presidente Andrés Manuel, demuestra cómo esta oportunidad de llevar ante la justicia a individuos y redes de corrupción del más alto nivel, está siendo desperdiciada por la Administración Federal actual y la Fiscalía General de la República, tal y como escribieron los profesores Juan Jesús Garza Onofre y Javier Martín Reyes “las filtración no busca una exitosa judicialización del caso, sino su mera politización”. 

Es fundamental que un gobierno que aspira a ser democrático, pueda tener en cuenta la importancia de encauzar asuntos cómo el caso Lozoya ante las instituciones de procuración e impartición de justicia, ya que la argumentación para llegar a una determinación judicial (sentencia, autos, etc) requieren de una formación lógica basada en evidencia y construcción fáctica, cuestión distinta a una índole política que responde a intereses específicos. Como bien escribió Francesc de Carreras en el diario español El País: “[…]Politizar la Justicia no significa que los políticos sean juzgados por incumplir las leyes sino que los jueces, en el ejercicio de su cargo, tomen decisiones que son propias de los políticos, de los representantes del pueblo, vulnerando así un principio clave del Estado de derecho, el de la independencia judicial, según el cual la función judicial consiste únicamente en aplicar la ley y sólo así puede justificarse que el poder de los jueces es democrático” (2017). 

Estas viejas y tan arraigadas prácticas de evitar una verdadera búsqueda de la justicia ante casos que involucren políticos mexicanos, nos permite reflexionar sobre la necesidad de transitar a una nueva forma de concebir la justicia ante este tipo de casos. Esto es muy importante para establecer precedentes y detectar flagelos en las instituciones públicas para garantizar una no repetición de hechos de corrupción, pero es igual de relevante exigir desde la sociedad que estos asuntos no se queden en la “justicia mediática” que erosionan los argumentos y la esperanza de construir una verdadera democracia y estado de derecho. 

Tras balacera destinen a tres en San Pedro

Comparte este artículo:

Un operativo por parte de agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado terminó ayer en una persecución a balazos en la que fueron detenidos tres hombres armados, esto en el municipio de San Pedro.

En la incorporación de Lázaro Cárdenas a Gómez Morín, agentes ministeriales chocaron su patrulla tipo pick up contra la parte trasera de un auto Nissan Marche en el que viajaban los supuestos delincuentes, esto con el fin de evitar su huida.

La colisión alcanzó a una conductora de un vehículo Swift y a su acompañante, quienes fueron impactados por el March. Ambos sufrieron lesiones leves y fueron atendidos por Protección Civil de San Pedro.

Los hechos se registraron alrededor de las 11 horas de este domingo y causó la movilización de decenas de policías ministeriales, municipales y estatales, además de personal de la Guardia Nacional.

En el auto March fueron encontrados un fusil y una pistola.

En un video que circuló en redes sociales se puede ver que agentes ministeriales mantienen sometido boca abajo a uno de los sospechosos, quien trata de huir a pie.

Fuentes de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) confirmaron que los detenidos son considerados como sospechosos en una investigación que realiza un grupo de homicidios.

Los sospechosos fueron detectados cuando ingresaron a San Pedro, por Lázaro Cárdenas, y fueron seguidos.

Al verse sorprendidos, el sospechoso que conducía aclaró para evadir a los ministeriales y se desató la persecución, en la que por lo menos se realizaron dos disparos.

(Con información de Grupo Reforma)

Dimes y Diretes: “EPN desconoce al PRI”

Comparte este artículo:

Cada que tiene oportunidad el presidente de todos, Enrique “Henry Monster” Peña Nieto, hace referencia sobre los peligros del “populismo” para México y claro para el sistema neoliberal que tiene nuestro país. No hay otra forma de ver esto más que por el lado de que, el mismo Peña Nieto, esta desconociendo a su partido y junto con ello la historia del mismo.

El presidente del copete de oro parece no conocer la historia del partido del que forma parte desde hace muchos años. El PRI, originalmente conocido como Partido de la Revolución Mexicana y antes de esto como el Partido Nacional Revolucionario, es y fueron partidos populistas.

Uno no debe de olvidar que fue el mismo PRM con Lázaro Cárdenas, el que expropio el petróleo mexicano, una acción 100% populista y socialista. Este mismo partido, el PRM, estuvo formado por diferentes sindicatos mineros, campesinos, profesionales, industriales, artesanos y comerciantes.




Tampoco olvidemos que incluso hoy en día el PRI, tiene una de las maquinarias sindicalistas más importantes a nivel nacional. La CTM, CROC, CNC, Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, y el Sindicato Mexicano de Electricistas, son gremios creados por el mismo PRI y que claro representan mucho de su voto duro en época electoral.

Peña Nieto sigue insistiendo en hablar de populismo y sus peligros, cuando el partido al que pertenece lleva ejerciendo políticas populistas desde hace 88 años. El PRI no es un partido liberal, es un partido que en su momento fue creado para atender las necesidades del pueblo, después de la Revolución Mexicana. Incluso, me arriesgo a decir, que el PRI tiende a escoger candidatos “populacheros” puesto que está en su naturaleza hacerlo.

Tratar de satanizar el populismo, que ha ejercido por años el PNR, PRM y ahora PRI, para dañar la imagen de Andrés Manuel López Obrador “el Peje, no funciona, no va a funcionar, no va a lograr su objetivo.

¿Qué acaso nuestros personajes políticos creen que la frase “es un peligro para México” sigue funcionando?

¡Ahí Se Leen!




______________________________

– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

 

 

Debo no niego, pago no tengo

Comparte este artículo:

Este lunes 6 falleció en la Ciudad de México, Jesús Silva-Herzog Flores, ex secretario de Hacienda en el sexenio de López Portillo.

Emblemático hombre del priismo de los últimos 40 años, hijo del ideólogo de Lázaro Cárdenas, Jesús Silva Herzog y padre de uno de los intelectuales mexicanos más destacados de este siglo, del igual nombre, Jesús Silva-Herzog Márquez.

Don Jesús fue un político diferente en el priismo, con una personalidad más austera, sin escándalos, ni enredado con ficheras como su jefe López Portillo y otros secretarios de esos tiempos.

Le tocó devaluar la moneda en 1982, una de las devaluaciones más significativas que tuvo el país. Se recuerda aquella frase de “Debo no niego, pago no tengo” que alguna vez profirió don Jesús en un documental referente a aquel sexenio.

Silva-Herzog haciendo uso de los habilidades negociadoras y facilidad de palabra logró re-negociar la deuda, reencausar una economía en plena caída libre y aceptar el papel de “el secretario que devaluó”.




Siempre leal al partido intentó varias veces ser Presidente de la República, pero se quedó con las ganas en dos ocasiones.

En el 2000, en aquella elección que puso a Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno de la capital, Jesús Silva-Herzog logró un tercer lugar con una de las mejores votaciones que ha tenido el PRI en la ciudad.

Asimismo, como embajador en Estados Unidos en la década de los noventas, logró aquel financiamiento del gobierno de Clinton que ayudó a México a salir de la crisis del “Error de diciembre”.

Don Jesús, fue un priista diferente, de una casta distinta, de la verdadera Revolución de la que su padre fue parte. Quizás el legado más grande de Silva-Herzog será la fundación del INFONAVIT, una institución de seguridad social fundamental para este país.

Se fue un líder, uno de los últimos ideólogos históricos del PRI, de los pocos priistas que se salvan de la típica crítica contra el partido. Que en paz descanse.

Lo dicho, dicho está.




______________________________

– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

Peña Nieto: el presidente que le quedó grande ser mexicano

Comparte este artículo:

Ya han pasado poco más de cuatro años desde aquel día donde los mexicanos, fueron testigos del regreso del Partido Revolucionario Institucional a la presidencia, por medio de Enrique Peña Nieto. En medio de un considerable escepticismo ciudadano, y de un desencanto hacia la oposición, que se había incorporado al sobreestimado “Pacto por México”, comenzaron (para EPN) y volvieron a iniciar (para el PRI en su conjunto) los días dentro de Los Pinos; dejando a un lado los errores en sus discursos, los cuales se referían a información que todo servidor público decente debería saber, la presidencia de Peña inició con el pie izquierdo: fomentando una reforma energética que desmantela los logros de Cárdenas por mantener nuestros recursos dentro de la esfera soberana.

Igualmente, continuando una reforma educativa, la cual, requiere de forma urgente modificaciones para convertirse en algo más que una iniciativa de reforma al sistema laboral de los profesores pertenecientes a escuelas públicas; las políticas regresivas de recaudación, como el aumento desproporcional del IVA, constituyen un argumento más para afirmar la política decadente que desde un inicio manejaba el aún ejecutivo.

Ahora bien, encima de la mala gestión inicial, resulta imposible no tocar el tema de los escándalos del presidente y compañía (familia y su gabinete) si se desea hablar de este sexenio por concluir (afortunadamente); la casa blanca de su cónyuge, Angélica Rivera, y el cínico video donde ella trata de justificarla, el avión presidencial, el reciente descubrimiento del plagio a su tesis profesional, las nada creíbles disculpas presidenciales respecto a la casa blanca, la “otra casa blanca”, de su secretario de hacienda Luis Videgaray, los departamentos de su esposa, y más recientemente la invitación a Trump. Todo esto es lo que sucede cuando se elige a un candidato de papel.

En cada uno de estos escándalos, las justificaciones rodeaban de incredulidad a la mayoría de la sociedad: que Videgaray había adquirido sus millonarias propiedades vendiendo obras artísticas que se negaba a mostrar, que si el avión presidencial valuado en millones no podía cancelarse porque resultaría en un mayor gasto, que si Angélica Rivera mencionaba que se habían metido con su familia con el reportaje de su inmueble.

En fin, todo un espectáculo de excusas que ni siquiera ellos se creían llegó a nosotros durante estos años, en los que algunos verdaderamente deseábamos que el escándalo del momento fuera el ultimo, en razón de rescatar la poca dignidad que le quedaba a México en el ámbito internacional.

Hoy, tras haberse suscitado nuevos escándalos, como el plagio de Peña Nieto (el cual se atreve a afirmar descaradamente que se trata de un error metodológico), y como la invitación al candidato republicano, Donald Trump (la cual se consagra como la burla suprema del presidente hacia la nación entera), no solo queda claro (hasta al más fiel militante del PRI), la nula capacidad intelectual, ética y direccional de Peña, sino también nos revela que este personaje, además de quedarle muy grande la investidura de jefe de estado, le queda mucho más grande la de mexicano; pues un mexicano, por más poca capacidad que tenga en los distintos campos, no va a poner de rodillas a su país como lo hizo con Trump recientemente; un mexicano no mancilla de esa manera la bandera y el orgullo de su nación con estos actos tan deplorables que presenciamos en este sexenio por terminar.
Peña, no solo ha sido el presidente que no merecemos ni necesitamos, sino que también ha sido la persona que no merece tener el honor de decirse mexicano.

______________________________
– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

La paradoja del campo mexicano

Comparte este artículo:





El tema del campo en México ha sido visto desde diversas perspectivas a lo largo de toda la historia; desde la visión de la Colonia, el zapatismo hasta el neoliberalismo de los 90s.

En el siglo XX, el campo mexicano tuvo el mayor cambio en toda la historia, el concepto intelectual del ejido fue transformado en una realidad, en una de las tantas reformas sociales del General Cárdenas.

Sin embargo, el tiempo pasó y en los 90s en las vísperas de TLC y diversos tratados internacionales, el campo sufrió cambios, la figura del ejido fue relegada a la sombra, se favoreció a los grandes terratenientes y productores y se impulsó el libre comercio internacional dejando a los campesinos en una situación muy desfavorecida.

En la televisión y prensa vemos como el Gobierno Federal se ufana de promocionar las supuestas ayudas al campo. Sin embargo, en pleno 2016 vemos como el campo mexicano es tierra muerta, desierta, explotada por unos cuantos y por los intereses de otros.




Conversando de primera mano con personas del campo podemos analizar lo complicado que es el estatus actual del campesinado mexicano donde están a merced de todo y sostenidos por nada.

Por un lado están los apoyos y créditos de la Sagarpa los cuales son trámites excesivamente burocráticos y sin sentido que confunden a la gente. Un ejemplo muy claro es el trámite de uso de aguas ya sea por medio de bombas, pozos o norias con la Conagua, el trámite es exhaustivo, donde obligan a la gente a recorrer distancias enormes para efectuar pagos menores a 200 pesos que se pudieran hacer desde los mismos pueblos o rancherías.

Sin embargo, el obstáculo más grande se llama “Secretaría de Hacienda”, la secretaría que dirige Luis Videgaray tiene en su haber una lista de procedimientos para el campo que si bien vistos de una manera pudieran llegar a verse adecuados, en la práctica es un sinsentido agotador.

Veamos el ejemplo de un campesino propietario de un rancho que quiere buscar un apoyo de la Sagarpa. Primeramente tiene que hacer el trámite en su pueblo más cercano y el alta ante el SAT y creación de firma electrónica en la ciudad que le corresponda (normalmente más de 200 km para llegar), ahora bien, aquí viene el problema más complicado que es la venta de productos y compra de insumos porque al declarar al SAT existe la necesidad de facturar a unos y otros.

¿Usted cree que un pequeño vendedor de forrajes o una pequeña ferretería tienen Firma Electrónica? Al reducirse el mercado y el número de proveedores deja al campesino sin una motivación real de emprender el trabajo.

Otro problema es que muchos de los créditos al final son usados para las necesidades propias de la familia y no de la tierra, lo que vuelve inútil en términos prácticos el apoyo en sí.

Súmele lo carísimo que es que la CFE instale la luz entre las brechas y la inseguridad rampante donde cualquier rancho termina a merced de Los Zetas

Alguna vez en este espacio y en otros tantos se ha recomendado la figura de las cooperativas ejidales, sin embargo, como el concepto lo indica, un rancho es de un particular y un ejido es colectivo y los conflictos en la repartición de ganancias y del trabajo en sí están siempre sometidos a disputas.

En pleno 2016, la infantilización del campesinado sigue vigente. Organizaciones como la Sedesol, la Conagua, la Sagarpa y sindicatos ruines como la CNC los tratan de ignorantes, incapaces e ineptos que con una despensa o un apoyo de 10 mil pesos estarán contentos.

El campo mexicano agoniza a manos del gobierno y la inseguridad que solo ofrece inestabilidad, sufrimiento y agonía a quienes labran la tierra…. Y no se ve cuando termine esto.

______________________________
– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

Misa de cuerpo presente: PEMEX

Comparte este artículo:

Otra vez ocurrió una tragedia donde el nombre de Petróleos Mexicanos está metido y ahora no fue otro despilfarro del sindicato o tráficos de influencia, fueron víctimas humanas, trabajadores que murieron víctimas de la negligencia de la dirigencia de la planta y de Mexichem.

La existencia de accidentes no es algo extraño en la industria petrolera, pero la incompetencia en el manejo y en el mantenimiento es algo tan mexicano que nos hemos acostumbrado a solo agachar la cabeza y llorar por las víctimas como en todos los temas que impactan negativamente la nación.

No tengo la más mínima confianza en lo que vaya a o deje de hacer José Antonio Gonzalez como director de PEMEX, que simplemente es un sepulturero más que tratará de que el cajón fúnebre luzca de buena madera. Con privatización o no, el anuncio de la muerte de la petrolera tarde o temprano llegará y a decir verdad quizás ya estamos preparados para el funeral.

Esto es parte de la sistemática degradación de PEMEX, poco a poco ha ido avanzando el cáncer; desde tiempos del infame Joaquín Hernández Galicia alias “La Quina” que se robó hasta las tuercas de las refinerías para llegar a la dictadura actual del otro traidor de la clase obrera llamado Carlos Romero Deschamps que por salud mental no quiero pensar cuánto se ha robado. Aquella empresa nacional creada a bien por el General Cárdenas ahora es solo un recuerdo de algo que fue y no volverá a ser. Una empresa que mataron, sí , Pemex no murió por el mercado internacional, no fue la OPEP, no fue el “imperialismo yankee”. Fueron Los Pinos, su sindicato ruin y los compadres del presidente en turno que han manejado la empresa.

Como es una costumbre muy mexa, todo lo que toca el gobierno lo termina empeorando, ejemplos no faltan: Pemex, Conasupo, CFE, Luz y Fuerza, Concarril, etc. Ustedes, la clase política mataron a la empresa, tú, Carlos Romero… ustedes son los traidores, vendidos, ratas, ladrones, cobardes, anti-obreristas, ustedes que son los que se van a enriquecer con la venta no van a poner ni un peso por los trabajadores muertos en los accidentes, no pusieron ni pondrán un peso por las ciudades petroleras como Minatitlán o Coatzacoalcos que van a terminar temblando para ver que hacen en el “after Pemex”.

Hoy en Coatzacoalcos perdieron muchos no solamente Pemex; perdieron el trabajador a pie, su familia, los proveedores, las tiendas de autoservicios hasta el que vende tacos afuera de las plantas, el impacto a la cadena económica es terrible y nadie ha salido a dar la cara por esta bronca que tiene a la ciudad paralizada.

La existencia de accidentes no es algo extraño en la industria petrolera, pero la incompetencia en el manejo y en el mantenimiento es algo tan mexicano que nos hemos acostumbrado a solo agachar la cabeza y llorar por las víctimas como en todos los temas que impactan negativamente la nación.

De los discursos bonitos de los 54980965 directores que ha tenido PEMEX a largo de su historia no come la gente, no come el trabajador que arriesga su vida bajo condiciones paupérrimas solo por la “hueva política” de ponerse a trabajar como empresa que es y no como concesión de poder del presidente.

No tengo la más mínima confianza en lo que vaya a o deje de hacer José Antonio Gonzalez como director de PEMEX, que simplemente es un sepulturero más que tratará de que el cajón fúnebre luzca de buena madera. Con privatización o no, el anuncio de la muerte de la petrolera tarde o temprano llegará y a decir verdad quizás ya estamos preparados para el funeral.

Estimado lector, sobre Pajaritos hay que llorar, pero las lágrimas son para los obreros, los que si amaron a PEMEX, no para el gobierno, ellos no merecen nada.

______________________________
– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

Nacionalizar es descolonizar

Comparte este artículo:

Esta gran frase de Vicente Lombardo Toledano, secretario de la Confederación de Trabajadores de México en los años 30s, engloba en tres palabras el sentimiento y las motivaciones que llevaron al General Lázaro Cárdenas a expropiar el petróleo en 1938.

En una época actual donde la privatización de algunas industrias es vista como algo favorable para la economía nacional, es difícil visualizar cómo fue posible la creación de PEMEX ante la presión diplomática.

Nacionalizar es descolonizar porque la nacionalización del petróleo conllevó a romper las ataduras imperialistas que tantos siglos nos habían agobiado y porque se demostró que un país latinoamericano tenía la dignidad y la capacidad suficiente para imponer su soberanía.

La expropiación petrolera trajo al país una importante transformación en cuestión de infraestructura y de orden político tras venir de décadas de caos después de la Revolución. Fue una más de esas políticas socialistas que tanto bien le hicieron al país como el reparto agrario, la creación de escuelas, la invención del ejido, el asilo español y Pemex, el gran baluarte del Estado Mexicano.

Si bien es cierto, la nacionalización conllevó una devaluación del peso en esa época, cimentó los primeros pasos del Milagro Económico Mexicano que tiempo después ocurriría en tiempos de López Mateos y Ruiz Cortines.

Nacionalizar es descolonizar porque la nacionalización del petróleo conllevó a romper las ataduras imperialistas que tantos siglos nos habían agobiado y porque se demostró que un país latinoamericano tenía la dignidad y la capacidad suficiente para imponer su soberanía.

No importó echarse encima al gobierno “yankee”, a los ingleses, al dictador Franco o incluso a la misma Unión Soviética, las políticas sociales que si favorecen al pueblo no deben ser cortesías a las potencias sino demostraciones de libertad.

El gobierno de Cárdenas demostró que se podía hacer política ayudando al campesinado y al sector obrero, al empresarial e incluso un singular apoyo a las minorías golpeadas como los refugiados españoles o el recibir a comunistas como León Trotski. No importó echarse encima al gobierno “yankee”, a los ingleses, al dictador Franco o incluso a la misma Unión Soviética, las políticas sociales que si favorecen al pueblo no deben ser cortesías a las potencias sino demostraciones de libertad.

Es iluso pensar que los políticos actuales deban copiar a Cárdenas o que el cardenismo fue perfecto y debemos regresar a las ideas de 1938. Sin embargo, la pasión y el dinamismo por el progreso nacional que se tuvo en esa época cuando se compara a los últimos 20 años de gobiernos nacionales dista mucho de tener siquiera algo de eso.

Nacionalizar es descolonizar porque fue justo y es justo cuando las potencias extranjeras no quieren hacer negocios con México sino a costa de México y aún más justo porque ocurrió cuando se dieron las circunstancias que en otro momento nos costaría otra invasión.

Lo dicho, dicho está.

______________________________
– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”