El primero de noviembre marca los primeros dos meses del comienzo de la LXVI Legislatura del Senado de la República y por lo tanto, los primeros dos meses de mi compañera Judith Díaz y yo como representantes de Nuevo León ante el Pacto Federal.
Han sido meses de muchísimo trabajo y de la satisfacción de saber que estamos avanzando con los compromisos que asumimos durante la campaña.
Sobre todo, hemos abierto las puertas del Senado para las y los nuevoleoneses como tanto soñamos.
Al asumir mi responsabilidad en la Cámara Alta, fuimos claros en nuestra convicción de que la política debe ser de hechos, no de palabras. Dos meses después, puedo decir con orgullo que hemos cumplido con distintos compromisos.
Durante el primer mes votamos a favor de la Reforma al Poder Judicial y hemos iniciado con impulsar iniciativas de las leyes secundarias para establecer los cómos. También aprobamos la iniciativa la Reforma a la Guardia Nacional, para consolidar esta institución, garantizar su permanencia y mejorar su capacidad operativa, así como el incremento al salario mínimo, y el reconocimiento a los derechos indígenas.
También presentamos la iniciativa de Seguros Justos, para frenar los incrementos desproporcionados en las primas de seguros.
Luego, en octubre, le devolvimos el carácter de empresa pública a la Comisión Federal de Energía y Petróleos Mexicanos, para que el acceso a la electricidad sea un derecho y no un privilegio. Igual de importante fue la aprobación de la reforma en materia de vivienda digna, igualdad sustantiva y el reconocimiento de los programas de bienestar en la Constitución.
También se instaló la Comisión Ordinaria de Seguimiento a la Implementación del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), donde mis compañeros legisladores me hicieron el enorme honor de designarme como su Presidente. Desde ahí he recibido a empresarios nacionales e internacionales de todos los sectores productivos del país para dialogar sobre los retos y las necesidades que cada uno de ellos tiene y que nos servirá para asegurarnos que éstos sean tomados en cuenta en la revisión del T-MEC.
Quizás lo más importante ha sido la enorme comunicación que hemos mantenido con las y los nuevoleoneses. Desde el día uno compartí mi teléfono de Whatsapp. Desde ahí he recibido cientos de quejas y peticiones de los ciudadanos con las que con mi equipo y yo estamos trabajando para traducirlos a mecanismos legislativos, tanto en el Senado como en el Congreso de Nuevo León.
Tan sólo durante octubre atendimos a 71 ciudadanos, generamos 41 oficios para trámites, otorgamos 17 asesorías legales y apoyamos en 7 solicitudes de salud.
Lo he dicho desde la tribuna, en los recorridos por las calles y en las reuniones que he tenido: hoy y siempre, tendrán una vía de comunicación con nosotros en mi WhatsApp 811800357.