Los recursos ilícitos generados en México por la delincuencia organizada ascendieron a un billón de pesos entre 2016 y 2018, informó la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
El titular de la UIF, Santiago Nieto, sostuvo que pese a que hay cárteles como Santa Rosa de Lima, que han ido perdiendo su posición, la delincuencia organizada ha multiplicado sus actividades delictivas y se ha ido moviendo del tráfico de robo de hidrocarburos y tráfico de drogas a delitos como el secuestro y la extorsión.
“La segundo amenaza tiene que ver con el nivel de recursos ilícitos generados en el país, los flujos financieros ilícitos han aumentado. Hoy, con información del Consejo de la Judicatura Federal, con información de la Fiscalía General de la República, e incluyendo el número de denuncias presentadas entre otras instancias por la UIF, se presenta un monto estimado ascendiente a un billón de pesos entre 2016 u 2018 como ganancias de los grupos delictivos. Por supuesto que esta metodología debe revisarse para presentar los datos exactos respecto al nivel de recursos ilícitos generados en el país”, dijo Nieto durante la conferencia para presentar la Estrategia Nacional de Combate al Lavado de Activos y Financiamiento al Terrorismo.
Por otro lado, el funcionario dijo que México se encuentra trabajando en la generación de una metodología para medir el volumen de recursos ilícitos generados en el país con plena exactitud.
Por su parte, el titular de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Juan Pablo Graf, dijo que una de las amenazas para las operaciones de lavado de dinero en nuestro país es el uso de efectivo en la economía nacional y la falta de inclusión financiera.
Pese a que el porcentaje de posesión de cuentas en adultos y las transacciones digitales han aumentado en los últimos años, México sigue rezagado en materia de inclusión financiera con respecto a otros países de la región de América Latina.
“Si bien hemos tenido esfuerzos, sí tenemos que notar que todavía en términos de inclusión financiera, en algunos comparativos internacionales, nos quedamos cortos. En las cuentas por mil adultos, comparados con países de la región, todavía estamos rezagados”, comentó Graf.
Las cuentas por cada mil adultos que registró México hasta 2018 fueron mil 16, lo cual es bajo respecto al número que tiene Perú, con mil 549; Colombia, con mil 813, o Chile, con 2 mil 848, el país más alto.
En tanto, el número de cuentas bancarias por adultos en México aumentó de 36 a 47 por ciento de 2012 a 2018, pero esto sigue siendo insuficiente.
“México tiene que avanzar más en inclusión financiera para ganarle al efectivo, controlas las transacciones y tener mayor claridad y trazabilidad en las operaciones del sistema financiero”, agregó Graf.
(Con información de Grupo Reforma)