Durante la más reciente reunión de la Mesa de Coordinación Metropolitana, los alcaldes del área metropolitana de Monterrey coincidieron en que no existen las condiciones necesarias para implementar el transporte escolar obligatorio en el próximo ciclo escolar.
La propuesta, impulsada por el Gobierno del Estado de Nuevo León, busca que los estudiantes utilicen transporte escolar como medida para reducir el tráfico y mejorar la movilidad. Sin embargo, los ediles consideran que el plan requiere un análisis más profundo, así como un proceso de socialización con la comunidad y estímulos económicos que faciliten su adopción gradual antes de que pueda establecerse por ley.
El alcalde de Escobedo y presidente de la Mesa, Andrés Mijes, señaló que, si se llegara a establecer como obligatorio, debería contar con subsidios y beneficios fiscales que permitan a las familias y a las instituciones educativas costear el servicio sin afectar su economía.
En la misma línea, Manuel Guerra, alcalde de García, reconoció que los municipios mantienen reservas sobre la implementación inmediata de la medida, al considerar que aún faltan detalles por definir para garantizar su viabilidad.
Por otro lado, los alcaldes se mostraron a favor de impulsar el programa de auto compartido o “carpool”, planteando incluso la posibilidad de otorgar incentivos a la ciudadanía que participe en esta iniciativa.
De acuerdo con Mijes, en la zona metropolitana el promedio de ocupantes por vehículo es de solo 1 a 2 personas, por lo que duplicar esta cifra podría reducir de manera significativa la congestión vial.