La autopsia realizada por solicitud de la familia de George Floyd demostró que su muerte fue consecuencia de asfixia por la compresión de cuello y espalda cuando un policía de Minneapolis apretó su cuello con la rodilla por 8 minutos e ignoró sus gritos de que no podía respirar.
La autopsia realizada halló que la compresión bloqueó el paso de la sangre al cerebro de Floyd, y el peso sobre su espalda le dificultó respirar.
El resultado del procedimiento encargado por la familia difiere del obtenido en la autopsia oficial, cuyo contenido fue incluido en la denuncia oficial contra el agente Derek Chauvin por el homicidio de Floyd.
Dicha autopsia incluía los efectos de permanecer inmovilizado, junto con problemas de salud subyacentes, pero indicó no haber hallado nada “que respaldara un diagnóstico de asfixia traumática o estrangulamiento“.
Con esto se confirma que Floyd fue asesinado por Chauvin y que los otros 3 policías involucrados en la detención también tienen responsabilidad en su deceso.
El afroamericano de 46 años fue abordado en atención de un reporte de que utilizó un billete falso para comprar cigarrillos.
Dos oficiales fueron los primeros en llegar al punto y lo arrestaron. Floyd no forcejeó ni opuso resistencia a que le colocaran las esposas, pero aparentemente se rehusó a ingresar a la patrulla por claustrofobia.
Otros dos agentes arribaron a la escena y finalmente lo pusieron contra el piso mientras Floyd gritaba que no podía respirar. Pasó 8 minutos con la rodilla de Chauvin sobre su cuello antes de perder la vida.
(Con información de SDP noticias)