El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no ha sido fácil enfrentarse a la pandemia del COVID-19, la crisis económica causada por está y a los llamados “conservadores”, durante sus primeros 2 años de gobierno.
En el marco de un acto para la supervisión de obras de mejoramiento urbano en la ciudad de Tijuana, Baja California, el mandatario federal agradeció el apoyo de los ciudadanos, al reconocer que en sus primeros 24 meses al frente del gobierno de la República ha lidiado con diversas adversidades que han ofrecido resistencia ante la llamada “Cuatralbos Transformación”.
“No ha sido fácil porque enfrentamos la pandemia, la crisis económica y también enfrentamos a los conservadores que querían mantener el mismo régimen de corrupción y privilegio, pero dijimos ‘basta'”, expresó López Obrador.
Acompañado del gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, el mandatario dijo que espera a la brevedad que todo México pueda salir de la actual situación de emergencia sanitaria, debido a las gestiones realizadas por su gobierno para acceder a la ansiada vacuna contra el COVID-19.
También en Tijuana, el presidente aseguró que su administración está recuperando las casetas tomadas “por delincuentes” y por personas “acostumbradas” a vivir por la toma de las casetas. Aseguró que la toma casetas ya se había convertido en una práctica de oficio en estados como Nayarit, Sonora, Sinaloa y muchos más; en tanto que para algunos funcionarios acceder a Carreteras y Puentes Federales (Capufe) era uno de los cargos más deseados, por la corrupción prevaleciente.
Dijo que su gobierno “está poniendo orden” y que su administración pondrá fin al llamado “reparto del botín” que se hacía del presupuesto público.