El mito del águila

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Propongo la siguiente definición de nación: es una comunidad política imaginada, y se le imagina como inherentemente limitada y soberana.

Es imaginada porque los miembros de la nación más pequeña nunca conocerán a la mayoría de sus conciudadanos, no se encontrarán con ellos, ni siquiera oirán hablar de ellos, pero en la mente de cada uno vive la imagen de su comunión (…) Las comunidades se distinguen no por su falsedad o autenticidad, sino por el estilo en que se las imagina.

Finalmente, [la nación] se imagina como una comunidad porque, independientemente de la desigualdad y la explotación actuales que puedan prevalecer en cada una, se concibe como una camaradería profunda y horizontal. En última instancia, es esta fraternidad la que hace posible, durante los últimos dos siglos, que tantos millones de personas no maten, sino que estén dispuestas a morir por esas imaginaciones limitadas.

— Benedict Anderson, Imagined Communities (1983)

Las historias y los símbolos son fundamentales porque nos permiten dar sentido a nuestra existencia, definir quiénes somos, cómo nos relacionamos con los demás y cómo nos situamos en el mundo. La identidad no se genera en un vacío; surge de la interacción entre nuestras experiencias personales y las narrativas compartidas que nos rodean.

Cuando hablo de narrativas, me refiero a la forma en que se estructura y cuenta la historia de nuestra existencia, aquello que determina el status quo y nos ayuda a entender nuestra realidad. Estas historias no solo definen a los individuos, sino también a las comunidades, los grupos sociales, las naciones y las culturas. Las narrativas colectivas, como las de la familia, la sociedad, la nación o la religión, nos proporcionan una identidad compartida y un sentido de pertenencia. Por ejemplo, las historias de la fundación de una nación, las leyendas populares o los mitos religiosos crean una sensación de continuidad y cohesión dentro de un grupo, conectando nuestras vidas individuales con algo más grande.

El mito del Volk

Völkisch es una palabra alemana que connota tanto lo “folclórico” como lo “populista”. En sus orígenes, era una visión cultural profundamente arraigada en la idea de una identidad nacional compartida y un amor por las tradiciones, la naturaleza y el idioma. Como ocurre con muchos mitos, es difícil rastrear su origen exacto. Sin embargo, se le atribuye gran parte de su desarrollo a Richard Wagner, cuyas óperas y representaciones de la esencia germana a través de mitos y leyendas –como la trilogía del Nibelungo— son parte integral del pensamiento völkisch.

El riesgo de la instrumentalización

Lo que comenzó como una narrativa de identidad para el pueblo germánico terminó convirtiéndose en el mayor catalizador del nacionalismo y el mito de la raza aria. Paradójicamente, Houston Stewart Chamberlain, un británico que se fascinó con Wagner, se casó con su hija y desarrolló las teorías de la raza aria. El resto de esta historia es bien conocido, y lo obviaré…

El nacionalismo

El peligro de las narrativas identitarias en las naciones es la polarización, pues para pertenecer a un grupo, es necesario definir al “otro”. Como bien dice Sartre, “somos conscientes de nosotros mismos en tanto que somos vistos por otros”, y nuestra identidad se configura, en parte, a partir de cómo nos ven. Al diferenciarnos, las narrativas y los símbolos pueden ser manipulados para excluir a otros o justificar ideas peligrosas. El nacionalismo extremo, por ejemplo, puede distorsionar las historias colectivas para construir una identidad que excluye o demoniza a ciertos grupos. Los mismos símbolos que unifican a una nación pueden usarse para fomentar el odio, la xenofobia o el racismo.

Más mexicanos, más… ¿humanos?

La Encuesta Mundial de Valores (EMV) ha revelado una tendencia curiosa: los mexicanos son cada vez más conscientes de su historia y, por ende, se sienten más orgullosos de identificarse como mexicanos. Sin embargo, este orgullo nacional no está necesariamente relacionado con una mayor disposición a “sacrificarse” por el país.

Esta paradoja puede deberse a varios factores que influyen en la identidad nacional y en la relación de los ciudadanos con el Estado y sus instituciones. Los mexicanos sienten un fuerte sentido de identidad basado en elementos culturales como la historia, la música, las tradiciones y la rica herencia cultural. Este orgullo parece estar más vinculado a la comunidad y la cultura que a las instituciones gubernamentales, incluidas el ejército.

Cansados de luchar…

A pesar del orgullo por la capacidad de resistencia y la lucha cotidiana, esta misma lucha puede generar una sensación de agotamiento y una menor disposición a comprometerse con sacrificios extremos, como la lucha por la nación. El aumento del orgullo nacional parece estar más relacionado con la comunidad y la solidaridad ciudadana que con el Estado o sus instituciones.

Los mexicanos pueden sentir satisfacción y orgullo por la capacidad de unirse frente a las adversidades como sociedad civil, mientras que desarrollan un desapego hacia el gobierno o hacia cualquier noción de “lucha” que implique obedecer a las autoridades políticas o militares. Este fenómeno también refleja una mayor conciencia crítica de la historia, lo que lleva a muchos a rechazar las narrativas tradicionales del nacionalismo vinculado a la guerra y los conflictos armados.

Hoy, la comunión con el ser mexicano funciona porque imaginamos a nuestros compatriotas a través de nuestra individualidad, aun sin conocer a la mayoría. Sin embargo, “en la mente de cada uno vive la imagen de su comunión”, aunque nuestra imaginación está limitada y segmentada por círculos sociales y económicos.

Sobre la historia y la libertad

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Aquel que sabe controlar los símbolos lo controla todo; y las narrativas históricas no son otra cosa que relatos simbólicos. La historia es una falsificación basada en hechos reales.

Si las historias que nos contamos definen nuestra identidad, ¿hasta qué punto somos realmente víctimas de nuestro pasado o dueños de nuestro futuro? Para muchos pensadores, cada uno de nosotros, nuestras comunidades y países, somos un cúmulo de narrativas y símbolos. Pudiéramos bajo esta lógica ser perfectamente descritos y, por ende, nuestras conductas perfectamente predecibles gracias a aquellas historias a nuestro alrededor, la ropa que usamos, nuestro equipo de fútbol y demás signos por los que nos sentimos identificados. Tal vez esta reflexión no esté tan alejada de la realidad, sin embargo, implicaría tener que comprender la libertad como casi inexistente. ¿Es acaso que nuestra historia define nuestros gustos o nuestras decisiones? Y más importante aún, ¿tenemos poder sobre nuestra narrativa?

La percepción que tiene una persona de ser libre en sus acciones o elecciones es consecuencia de una falta de conocimiento de las causas que le influyen o que le condicionan. A medida que aumenta nuestro conocimiento y comprensión de las causas que influyen en nuestras acciones, es posible que esa sensación de libertad subjetiva se vea cuestionada o modificada, ya que nos damos cuenta de que nuestras elecciones están en gran medida determinadas por factores que previamente no habíamos tenido en cuenta. Tal vez no somos más que una consecuencia de causas anteriores, pero esto no significa que no poseamos libertad, sino que esta está vinculada al conocimiento y la comprensión de las influencias que operan en nuestra vida.

Las historias que nos han contado sobre nuestro país y nuestra sociedad pueden moldear las creencias, actitudes y comportamientos. Si nos vemos a nosotros mismos como actores aislados en la historia, si ignoramos las causas y los condicionantes que han dado forma a nuestra realidad, nuestra libertad subjetiva puede ser ilusoria.

La conciencia histórica implica mirar críticamente nuestro pasado, reconocer tanto los logros como los errores, y comprender cómo han influido en nuestro presente. Significa reconocer que somos el resultado de una larga cadena de acontecimientos, decisiones y circunstancias.

A lo largo de las eras, las cúpulas dinámicas de poder han forjado las narrativas que dan forma a nuestra comprensión del pasado. Las llamo dinámicas ya que ha habido diversos momentos de poder imperante por parte de ciertos grupos determinados a lo largo de la historia. Por ejemplo: la influencia de la Iglesia, quién fuera reemplazada por la ascensión de la monarquía y el posterior protagonismo de la burguesía y los capitalistas. Estas élites han desempeñado un papel crucial en la manipulación de las historias que perpetúan su dominio. Cuestionar las historias oficiales puede ser la clave para entender las complejidades y dinámicas cambiantes del poder a lo largo de la historia.

Esta dinámica en constante cambio subraya la necesidad de una comprensión más completa de la historia, destacando que incluso las élites están sujetas a transformaciones, y que su versión de la realidad puede ser moldeada por sus propios intereses. Cuestionar las narrativas propuestas a lo largo del tiempo se convierte entonces en un acto esencial para alcanzar una comprensión más auténtica y liberadora de nuestro pasado.

¿Es posible reescribir nuestra historia colectiva? La conciencia crítica y la búsqueda activa de una comprensión más completa se presentan como herramientas fundamentales para redefinir nuestra relación con el pasado. Al cuestionar las versiones preestablecidas, la sociedad puede embarcarse en la construcción de nuevas narrativas que reflejen una identidad más inclusiva y una visión de futuro diferente.

En esta búsqueda, la reevaluación de figuras históricas se convierte en una tarea imperativa. Para el caso de México, es necesario matizar en grises aquellos héroes de la SEP: Revisitemos historias como la de Benito Juárez, Hernán Cortés, Antonio López de Santa Anna o Porfirio Díaz. Revaluemos las civilizaciones prehispánicas y lo que nos han contado de ellas: si vivíamos en una utopía gracias a los aztecas o la mayas en este territorio, ¿por qué los Tlaxcaltecas y demás civilizaciones prefirieron aliarse con los españoles y “apoyar” la conquista?

Reconocer la complejidad de estas figuras nos invita a despojarnos de las etiquetas maniqueas de héroes y villanos, abriendo espacio para una apreciación más matizada de su legado. Así, la posibilidad de reescribir nuestra historia se manifiesta como un acto de empoderamiento colectivo, permitiéndonos crear un relato más auténtico y resonante que abrace la diversidad de experiencias y perspectivas que han tejido el tapiz de nuestra identidad histórica.

Los hombres se engañan al creerse libres; y el motivo de esta opinión es que tienen conciencia de sus acciones, pero ignoran las causas porque son determinadas; por tanto, lo que constituye su idea de libertad, es que no conocen causa alguna de sus acciones (Spinoza, B. [1677]. Ética.)

En este viaje de reflexión, enfrentamos desafíos y oportunidades al reconocer la influencia de la historia en nuestras vidas. No somos libres de nuestro pasado, pero sí somos libres para tomar decisiones a partir de él. Al abrazar el conocimiento de nuestras limitantes y lo que estamos “condenados” a ser, encontramos una libertad auténtica.

Los desafíos radican en desentrañar las complejidades de nuestras narrativas históricas, desafiando las versiones simplificadas que nos han sido impuestas. ¿Cómo podemos utilizar este conocimiento para empoderarnos en lugar de sentirnos atrapados por el pasado? La respuesta reside en la comprensión de que cada capítulo de nuestra historia presenta oportunidades para la transformación. Cambios individuales y colectivos pueden surgir de una comprensión más profunda, permitiéndonos abrazar nuestra diversidad y construir un futuro basado en la inclusión y la autenticidad. Así, en el viaje de la historia, descubrimos que la libertad es ilusioria, pero lo más cercano a ella se encuentra en la capacidad de saber que somos consecuencia de la interpretación del pasado; sin embargo, la consciencia de la información nos ofrece la posibilidad de redefinirnos y un lienzo sobre el cual pintar un nuevo y consciente destino.

 

*Economista, tuitero y consultor

Busca Gaona promover e incentivar, cultura y lectura en Nuevo León.

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El Coordinador de la Bancada Naranja, Eduardo Gaona ha presentado una iniciativa para crear la Ley de Bibliotecas local; margen legal que busca incentivar la cultura y lectura en el estado.

El legislador explicó que solamente 9 estados de México cuenta con una Ley similar, por lo que puntualiza que Nuevo León debería de darle más importancia y un enfoque especial.

Con este proyecto, Gaona plantea que las bibliotecas funcionen en red, que el servicio sea gratuito, se mejoren sus instalaciones y que cuenten con computadoras y acceso a internet.

Gaona mencionó que en la entidad se cuentan con 426 bibliotecas, entre ellas 314 son parte de la Dirección General de Bibliotecas y 112 forman parte de universidades públicas y privadas.

El dirigente finalizó argumentando que a nivel nacional existe una necesidad enorme de fomentar la cultura y la lectura, pues generalmente es un rubro al que no se le suele atribuir mucha atención en las políticas públicas.

Hermano de AMLO buscará candidatura en Tabasco

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José Ramiro López Obrador, hermano del Presidente AMLO, renunció a la subsecretaría de Asuntos Fronterizos, Migrantes y Derechos Humanos del Gobierno de Tabasco para buscar una candidatura en 2021.

A un año y nueve meses en la subsecretaría, el político tabasqueño presentó una de seis renuncias anunciadas este domingo en la Administración del Gobernador Adán Augusto López Hernández.

Marcos Rosendo Medina dejó la Secretaría de Gobierno;Yolanda Osuna Huerta, la de Cultura, y Mario Llergo la de Bienestar, Sustentabilidad y Cambio Climático.

Luis Roberto Salinas Falcón se separó del Comité de Planeación para el Desarrollo del Estado, y Mayra Jacobo de la Secretaría para el Desarrollo Económico y Competitividad.

José Ramiro López Obrador fue nombrado subsecretario estatal en enero de 2019, tras un retiro político de ocho años.

En 2010, el también ex Alcalde perredista de Macuspana decidió dejar la política en medio de acusaciones por desvíos millonarios en venta de terrenos y mal ejercicio del presupuesto durante su encargo, de 2004 a 2006.

Entre los señalamientos está el de la entonces diputada federal panista Maky Esther Ortiz, por el proyecto Macuspana XXI y otro de la Auditoría estatal, que acreditó un faltante de 48 millones 932 mil 721 pesos en el Ayuntamiento de Macuspana.

Además, en 2012, la entonces Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nacíón, Olga Sánchez Cordero, actual Secretaria de Gobernación, señaló que José Ramiro López Obrador hizo mal manejo de los recursos municipales en 2005.

Sánchez Cordero resolvió que del 1 de enero al 31 de diciembre de 2005 existieron percepciones superiores a los montos máximos que tenía autorizado el Ayuntamiento en su tabulador de sueldos.

 

(Con información de Reforma)

El Divino en Monterrey

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Monterrey,México(23-Junio-17).-El público regio recibe la muestra “Miguel Ángel, El Divino” que abrió el pasado 21 de Junio en las salas del Museo del Noreste (Mune), que además festeja su décimo aniversario.

La muestra reúne 50 piezas producida por la empresa Naturaliter. Fueron creadas con tecnología a partir de escaneos de las obras originales y después perfeccionadas por artesanos.

Cada pieza fue certificada por el Museo Michelagiolesco de Caprese y la Dirección General de Bienes Culturales de Florencia.

La réplica del “David” es la que recibe al público, mide 5.17 metros, igual que la original y pesa más de una tonelada.

“Las obras de Miguel Ángel, excepto por unos dibujos o un par de esculturas, no se pueden desplazar. Las que traemos nosotros son réplicas de obras que no se mueven”, dijo el curador de la exposición, Giacomo Cantini.

En la muestra se encuentra un fragmento de la Capilla Sixtina en la sección dedicada a la pintura, también hay un área dedicada al Juicio Final.

Miguel Ángel fue un escultor, pintor y arquitecto italiano que además era un estudioso del cuerpo humano, lo que le permitió realizar sus esculturas con detalle. Los regios podrán entrar a ver obras del renacentista hasta el 31 de diciembre en las salas del Mune.

 

¿Por qué asistir al 4to Congreso Peatonal?

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Para muchos, ser peatón es una profesión. Lo hacen a diario utilizando sus mejores técnicas y habilidades. Para otros es un deporte. Lo practican con alguna regularidad y requieren de equipo especial para la ocasión. También están los turistas. Los que al ver que otros lo hacen, les gustaría probar la experiencia. Pero para otros es una actividad ajena que se ve desde un auto y no forma parte de su religión o cultura.

Para todos ellos es el 4to Congreso Peatonal.

Del 19 al 21 de Mayo, Monterrey será la sede de este evento gratuito en el que todos de alguna manera formamos parte del mismo gremio.

La temática del este año se llama “ciudadanía trabajando”  y es un acercamiento a las acciones que desde la sociedad civil se realizan para mejorar las condiciones de movilidad peatonal en ésta y otras ciudades a través del intercambio de experiencias, charlas, foros de diálogo, presentaciones, actividades y conferencias magistrales.

Es un espacio de aprendizaje del que pueden surgir acciones desde el sentir ciudadano para ser vinculadas a las instancias de gobierno necesarias.

Guillermo Peñalosa compartirá su amplia experiencia fomentando ciudades más sanas con residentes felices basándose en caminar y una buena generación de espacios públicos vivos.

Blanca Valdiva mostrará cómo al de-construir los espacios públicos en función de sus usuarios con una visión feminista se logra una verdadera transformación social.

Ciudadanos y activistas compartirán sus éxitos y proyectos. Y la contraparte vendrá de funcionarios locales y nacionales que mostrarán sus experiencias, logros y obstáculos para construir espacios de beneficio público.

Pero lo más importante es que el 4to Congreso Peatonal es un espacio de convivencia en el que todos se pueden llevar una pequeña o grande tarea para aplicar en sus colonias, barrios o ciudades y ser parte de un proceso de cambio por comunidades con sentido humano.

Pueden encontrar más información y registrarse a través de la página congreso.peatonal.org y visitar su página de Facebook: Congreso Peatonal. Abierto a todo público y es totalmente gratuito.

Al final de cualquier Congreso, los que participan salen como profesionistas mejor preparados con lo más actual de su materia. Del 4to Congreso Peatonal seguramente saldrán más profesionales de banquetas, calles y cruces peatonales a ejercer la profesión de ser peatón. Aunque no sea de tiempo completo.

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– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”

Pensamiento Condicional Amurallado: El motivo de muchos fracasos

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El pensamiento condicional amurallado, es el que siempre nos priva de tener éxito en cualquier ámbito de nuestras vidas, por más pequeñas que parezcan estas acciones, es decir, tener un pensamiento cuadrado, un pensamiento que no va más allá de las murallas mentales que nos imponemos nosotros mismos, ejemplos son:

Ir a la mejor universidad en tu área de interés predilecta.
Tomar ese curso de fotografía.
Estudiar pintura.
Salir con aquella chica guapísima.
Tener novia.
Emprender.
Etcétera.

Es como diría la sociedad vulgarmente, “ponemos barras” para después perdernos en la senda del fracaso. Mismo que estamos programados para jamás congeniar con él y pareciera que nos aferramos con uñas y dientes a este enemigo que destruye nuestras vidas desde lo más profundo de nuestro ser.

Pensamiento Condicional Amurallado es: aludir una responsabilidad o, mejor dicho, NUESTRA responsabilidad de pensar y resolver el afamado ¿cómo si puede suceder? Es también, dejarnos vencer ante nuestra primera oposición de la mente, esa reacción inmediata, que nos brinda seguridad y confort al no querer salir de nuestro lecho de comodidad.

El PCA, nos hace personas de un desempeño deplorable, como si estuviéramos destinados a siempre navegar en el lago de las mínimas posibilidades y no poder surcar en el picado y aventurado mar de la magia del éxito, peor aún, dejando pasar la vida ante nuestros propios ojos, sin riesgo, sin diversión.

Tener PCA y estar rodeados con personas que padecen de él, nos hace personas indeseables para los que ahora están en la cúspide, aquellos que han logrado vencer este pensamiento siempre quieren rodearse de gente exitosa, o por lo menos, personas que crean que alcanzar el éxito es altamente posible, recuerda que para estar en las grandes ligas, con grandes actores, es imperativo agregar valor a estos.

Dejar de lado este pensamiento es difícil, cuesta mucho, incluso disgustos con las personas más queridas, porque ellas siempre “van a querer lo mejor para ti”.

¿Cuándo?
A todas horas, te lo dicen Tus papás. Tus hermanos. Tus amigos. Sí, el primer círculo de confianza que nos rodea, es el primero en impregnarnos con PCA.

¿Cómo?

No te metas a estudiar cine “te vas a morir de hambre”.

No te vayas al extranjero “Hay muchos extraños, no conoces la cultura, el lenguaje y no sabes que pueda pasar”.

No aceptes ese trabajo fuera de tal o cual ciudad “Aquí es donde están las oportunidades”.

No emprendas, es mejor un trabajo que te brinde seguridad.

Y esta lista podría continuar, muchos párrafos para abajo.

No estoy diciendo que no tomes estos consejos. Tómalos, atesóralos, porque es una muestra de cariño por parte de tu primer círculo de confianza, pero filtralos, decide que quieres y que es en realidad lo mejor para ti.

Todos debemos dejar una huella marcada en las personas, debemos tocar sus corazones y no morir solos en el olvido, hay demasiadas personas que mueren a los 25 y las entierran hasta los 80, date cuenta, tú conoces a muchos. Es nuestro deber trascender, es a lo que vinimos al mundo, cruzar fronteras, incomodarnos, pasar penurias, resolver problemas, ser estrategas, aunque nadie entienda tu razón de ser y muchas veces te vean como su inferior, no debemos preocuparnos, es normal, no todos tenemos los mismos objetivos, lo que se avecina después es lo importante, es decir, llega lo tan anhelando: rompemos la liga, sacamos la bola del cuadro, hacemos la grande o como le quieras llamar al éxito.

Traspasemos fronteras, estamos diseñados para eso, preparémonos, no importa ¿dónde? ni ¿cuándo?, rompamos paradigmas, salgamos de nuestra burbuja, allá afuera es donde realmente funcionamos mejor, y logramos nuestras metas, objetivos y sueños.

Como un cohete espacial, que en tierra lo preparan años, después necesita salir de la atmósfera, romper varias capas, para al final llegar a su objetivo real, para lo que fue creado, estar en el espacio, con una dirección y un propósito, pasa igual con nosotros necesitamos sentar bases, formarnos, romper paradigmas y finalmente cumplir nuestro propósito de vida.

Te lo digo. Te lo firmo. Allá afuera comienza la magia, allá afuera es donde creces como persona y forjas un carácter que te hará un ser de éxito al término de unos años.

No vivas la vida que los demás quieren que vivas.

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No se quejen, les encanta

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Siempre he creído que el último recurso para los comediantes sin talento es “jotear”. Si no provocan risa, para “salvar” su show únicamente necesitan ponerse una peluca, una estola, hablar afeminados y repartir besos entre los asistentes. El homosexual es retratado como un pervertido insaciable que desesperadamente busca a cualquier ser del género masculino, no importa quién ni cómo sea. Necesita que le “hagan el favor” porque es un enfermo sexual al que le gusta ser penetrado y todo ser con gusto por ello es percibido como indigno y despreciable, sea hombre o mujer.

Y es que al mismo tiempo, las mujeres con gusto por el sexo son deleznadas y vistas como unas maniáticas a las que no hay que guardarles el mínimo respeto. Quizá sirvan únicamente como un entrenamiento antes de que nosotros encontremos a esa mujer virginal que merezca nuestra devoción y entrega. Esas percepciones naturalmente restringen la libertad sexual, llevando a muchos homosexuales a tener severas crisis de auto aceptación y a algunas mujeres a sentirse “usadas” después de un contacto sexual que no derivó en una relación formal o a exigir compromiso después de éste aún en casos en que no lo quieren realmente; “Que no piensen que soy una zorra más”.

El problema es que no son pocos quienes recurren a cuestionar la calidad moral de las víctimas o su orientación sexual y estos aspectos son completamente irrelevantes pues incluso si se tratase de una persona que se prostituye o que padeciera hipersexualidad (ninfomanía en mujeres, satiriasis en hombres) si éstas no están de acuerdo con el acto sexual, se tratará de una violación. Así de simple.

Paradójicamente, al tiempo que buscamos penetrar para saciar nuestras necesidades sexuales, despreciamos a quienes nos ofrecen saciarlas. Al receptáculo hay que encontrarlo y después desecharlo pues lo penetrado carece de honorabilidad. Tal vez por eso un hombre heterosexual violado es percibido como algo cómico mientras que para que consideremos que una mujer ha sido violada debe tratarse de alguien completamente inocente y pura; la violación no parece tener sentido en hombres homosexuales o en mujeres promiscuas porque a final de cuentas “les encanta” ¿de qué se quejan?.

Cuando se trata de nalgadas, “canasteos” o arrimones, para muchos parece exagerado hablar de agresión sexual pues estas conductas siempre han sido vistas como algo rutinario y casi cultural; sea quizá esa normalización de la agresión la que cause desconcierto en los propios agresores cuando de pronto son señalados por algo que siempre se les dijo que era inofensivo. Por ello, que unos sujetos suban a un automóvil a una mujer para manosearla, tal vez sea para algunos una simple cuestión anecdótica, un juego que se salió un poco de control, mientras que si se afirma que uno de ellos la violó, primero exigen que se prueba que la tipa era tan “santa” como dice ser.

Es cierto que sobre el caso de “Los Porkys” y los demás videos de violaciones que se han filtrado, sólo conocemos las versiones mediáticas. ¿Deben haber cuestionamientos sobre estos casos? Sólo serían admisibles aquellos que partieran de la presunción de inocencia y exigiendo a las autoridades que hagan un trabajo adecuado para analizar el material probatorio a fin de determinar si hubo agresiones sexuales y si existió consentimiento en el acto sexual. El problema es que no son pocos quienes recurren a cuestionar la calidad moral de las víctimas o su orientación sexual y estos aspectos son completamente irrelevantes pues incluso si se tratase de una persona que se prostituye o que padeciera hipersexualidad (ninfomanía en mujeres, satiriasis en hombres) si éstas no están de acuerdo con el acto sexual, se tratará de una violación. Así de simple.

Cuando se trata de nalgadas, “canasteos” o arrimones, para muchos parece exagerado hablar de agresión sexual pues estas conductas siempre han sido vistas como algo rutinario y casi cultural; sea quizá esa normalización de la agresión la que cause desconcierto en los propios agresores cuando de pronto son señalados por algo que siempre se les dijo que era inofensivo.

A la excesiva complicación que representa probar la existencia de consentimiento se suma el desinterés o el miedo a denunciar por parte de las víctimas sin olvidar la falta de eficiencia de las autoridades; el debate sobre los presuntos casos de violación salió de donde nunca debió salir y llegó a nuestras casas únicamente por la indiferencia del poder judicial. La ineptitud de las autoridades y el miedo al escarnio social han dejado libres a múltiples delincuentes y han originado que los activistas más radicales hayan llegado al espantoso desatino de sugerir la eliminación del principio de presunción de inocencia en casos de violación o a solicitar la aplicación de penas corporales con tintes de barbarie. Aun sin apoyar estas medidas e incluso repudiándolas, no parece muy extraño que se invoquen cuando suele no haber ninguna consecuencia negativa para quienes llevan a cabo actos tan abominables y tan a menudo.

Debemos exigir enérgicamente una eficiente persecución del delito y un perfeccionamiento en los métodos probatorios pero lo que nos toca a nosotros es entender realmente la violación y no juzgarla como una ridiculez o una consecuencia lógica de ningún tipo de comportamiento o estilo de vida. Nadie nunca debe ser forzado a llevar a cabo un acto sexual y quien sufra estas circunstancias, jamás deberá sufrir menosprecio sino recibir apoyo. Que “les encante” o no ser penetrados, es completamente irrelevante.

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Los Óscares se ponen feministas

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Recientemente, la equidad de género como discurso se encuentra muy elevado en la agenda de algunas figuras políticas de alto perfil internacional. Hillary Clinton, ex-secretaria de estado de los Estados Unidos y autora de uno de los discursos políticos más inspiradores de la historia titulado “Women’s Rights Are Human Rights”, se llevó las elecciones de medio término hace dos días como candidata a la presidencia. Por otro lado, Justin Trudeau, recién convertido en primer ministro de Canadá, además de ser galanazo, hace un despapaye por declararse feminista públicamente. Casi como si la palabra “despapaye” significara ‘que se le quita lo papacito’… ¡Ajá!, pues porque hay muchos para quienes todavía la “F-word”… (No, no, no. No F**k, sino Feminismo) es extremadamente imprudente y destruye el atractivo.

Las cintas nominadas a los Óscares este 2016 tienen un leitmotiv: el abuso (físico, verbal, sexual, económico) y la opresión a la mujer, a los niños y niñas.

Pero lejos de estos montajes de engalanados discursos y lustradas fachadas políticas construidas para atraer votos, los reflectores que mejor están retratando los “asuntos de la mujer” son los del cine. Las cintas nominadas a los Óscares este 2016 tienen un leitmotiv: el abuso (físico, verbal, sexual, económico) y la opresión a la mujer, a los niños y niñas.

En la cinta Carol, observamos a una mujer socialmente castigada por su marido tras descubrir su involucramiento en una relación sexual con otra mujer. La hija de Carol y la misma Carol sufren las consecuencias de las libertades que ella decide darse, teniendo que vivir separadas por lo que se consideraba una “conducta perversa”. El tema de mujeres que desean tener relaciones amorosas y sexuales con otras mujeres es un tema feminista.

Para el pensamiento de la época, querer convertirse en el “sexo débil” sobrepasaba lo absurdo y se interpretaba como demencia.

En The Danish Girl, vemos un caso un tanto más profundo, pues una persona que es biológicamente hombre pero mental y espiritualmente mujer, desea ser liberada y vivir como quien realmente es. Lili Elbe, por sus deseos de vivir su verdadera identidad, experimenta la invisibilidad, la negación de sus condiciones, y recibe el castigo de la exclusión social y la violencia. Para el pensamiento de la época, querer convertirse en el “sexo débil” sobrepasaba lo absurdo y se interpretaba como demencia. El tema de la identidad de género y las complejidades de la identidad psico-sexual son un tema trasversal al feminismo.

Mad Max (¡ay, que no he visto!) cuenta una historia de venganza contra un tiránico hombre que esclaviza y explota mujeres: una de las favoritas para el Óscar.

The Hunting Ground relata la obscura realidad que decenas de miles de jóvenes estudiantes en campus universitarios enfrentan: el abuso sexual y la consecuente culpabilización de las víctimas.

En la sección de documentales, The Hunting Ground relata la obscura realidad que decenas de miles de jóvenes estudiantes en campus universitarios enfrentan: el abuso sexual y la consecuente culpabilización de las víctimas.

Spotlight cuenta la historia verídica del destape de una de las maquinarias más impactantes de pederastia en la historia moderna. El abuso sexual a los niños y las niñas también está estrechamente relacionado con la mujer, pues, al centro de la vida familiar está, generalmente, la mujer. El abuso infantil y a la mujer son muy similares, así como se utiliza la vulnerabilidad y la falta de criterio de los niños para conseguir el “consentimiento” en el acto sexual, también sucede con las mujeres en su vida joven y adulta. Se toma provecho de la indoctrinación a la que muchas veces la mujer ha sido sometida desde que nace, la que la hace sentirse culpable de su sexualidad, la que la obliga a permanecer callada ante el abuso, a obedecer y a no cuestionar.

Curiosamente, aún cuando la cinta representa la relación entre un captor y una rehén, las escenas del día a día de estos dos personajes no distan mucho de lo que es la realidad en muchos hogares actualmente.

La película Room es quizás la muestra más espeluznante de lo que una mujer y sus hijos(as) pueden sufrir a la merced de un hombre violento. Curiosamente, aún cuando la cinta representa la relación entre un captor y una rehén, las escenas del día a día de estos dos personajes no distan mucho de lo que es la realidad en muchos hogares actualmente —el control de los recursos económicos, la virilidad violenta, la culpabilidad… —, aún cuando estas relaciones son consensuales: un matrimonio, un concubinato, una dinámica familiar.

Por último, la cinta Suffragette, que no ha sido digna de galardones esta temporada, es un relato basado en las vivencias de uno de los movimientos feministas más influyentes del siglo XX y su líder intelectual, Emily Pankhurst.

La demanda de estas cintas es claramente la equidad: el deseo por erradicar la violencia a las mujeres en todas sus formas. Lo malo es que tanto la demanda por la equidad de género como el conformismo con el status quo aparecen casi con la misma frecuencia en la cultura pop, confirmando el dicho que dice: “Tenemos la cultura que nos merecemos”.

En realidad, en los medios siempre veremos exactamente lo que pedimos, nuestros vicios y virtudes amasados y embarrados en las pantallas, las páginas y las ondas de radio. Yo por eso le digo a los críticos de Fifty Shades of Grey que se aguanten, porque esas deliciosas asquerosidades, ese “guácala, que rico” de una historia que está malísima, pero con unos forrazos de actores y actrices es exactamente lo que queremos ver, aunque no lo queramos aceptar. Sucede que como aún tenemos relaciones heterosexuales en las que la mujer se encuentra fascinada de ser la criatura sumisa que es suave y consideradamente desflorada, para después ser azotada en consenso.

El 2015 fue un año importante para el feminismo a nivel mundial: mujeres saudíes pudieron votar por primera vez, y recientemente se abrió la primera universidad para mujeres en Afganistán. Mujeres por fin pueden casarse con otras mujeres en los Estados Unidos y aquí en México también hubo avances legales en la misma cuestión. No obstante, las estadísticas pintaron un 2015 con más feminicidios e incidentes de violencia intrafamiliar que en años pasados, razón por la cual se instauró por primera vez la alerta de género como medida de seguridad estatal (¡bah!, después de casi una década de haberse instaurado en nuestra legislación y habiendo sido demandada con anterioridad).

Si la declaración à la Canal de las Estrellas de que el dólar “no va a afectar su economía personal” es para nosotros los mexicanos como que nos “den atole con el dedo”, quisiera pensar que además de la apreciación del dólar, lo que sí nos va a afectar de los Estados Unidos por el efecto de “derrame” cultural: es esta clara demanda por sociedades más equitativas entre hombres y mujeres, sociedades mucho menos violentas… y mucho más amorosas.

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EL GRAFFITI: ¿ARTE O VANDALISMO?

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La historia del graffiti, como lo conocemos en la actualidad, comenzó en los años 1960s en Estados Unidos, pero su existencia se remonta hasta la época del Sacro Imperio Romano Germánico.

La palabra graffiti viene del griego graphein que significa “escribir” y del italiano graffito, que significa “marca en la pared” o “inscripción en el muro”. El graffiti se crea generalmente con el uso de aerosol, aunque también se utiliza pintura y tinta.

La historia del graffiti, como lo conocemos en la actualidad, comenzó en los años 1960s en Estados Unidos, pero su existencia se remonta hasta la época del Sacro Imperio Romano Germánico.

En la Antigua Roma se acostumbraba rayar en las paredes expresiones de todo tipo: manifestaciones de carácter político, declaraciones de amor, insultos vulgares e incluso dibujos de un estilo similar a lo que hoy conocemos como caricaturas políticas. Estos abundan principalmente en las ciudades como Pompeya, Ostia y Roma.

No obstante, es hasta la década de los sesenta en Nueva York, Estados Unidos, cuando se da el (re)nacimiento del graffiti, convirtiéndose en un medio de comunicación ideal para un gran número de grupos marginados de jóvenes. Se utilizó para protestar artísticamente contra paradigmas sociales o situaciones políticas.

En la década de los setenta el graffiti tiene su auge artístico y se esparce por todo Estados Unidos y hasta Europa. Se convirtió en una evidencia de la existencia de una subcultura que cobró una gran importancia social y artística a nivel mundial.

Es hasta la década de los sesenta en Nueva York, Estados Unidos, cuando se da el (re)nacimiento del graffiti, convirtiéndose en un medio de comunicación ideal para un gran número de grupos marginados de jóvenes.

A partir de finales de la década de los ochenta, y en especial en la década de los noventa, se utilizan nuevas técnicas: como la aplicación de aerosol con plantillas y el pegado de calcamonías como se realizan los graffitis. Así parte del trabajo artístico se hacía en casa para que en la calle el trabajo pudiera hacerse más rápido, reduciendo el tiempo que el graffitero estaría expuesto a ser detectado.

El posmodernismo, la reestructuración del concepto de la urbanidad, la globalización inevitable y condiciones religiosas, económicas y antropológicas dieron pie a la creación en la actualidad de nuevas subculturas: nuevos grupos de cultura marginada. Según con Tristan Marco, “las condiciones socioeconómicas específicas de interacción dentro de las urbes posmodernas y sus subculturas determinan el modo en el cual se genera la producción de manifestaciones de cultura popular.” Esto dio pie a la creación de una nueva forma del graffiti: el graffiti esténcil.

El posmodernismo, la reestructuración del concepto de la urbanidad, la globalización inevitable y condiciones religiosas, económicas y antropológicas dieron pie a la creación en la actualidad de nuevas subculturas: nuevos grupos de cultura marginada.

El graffiti esténcil es entonces un producto de una subcultura posmoderna. Esta nueva forma del graffiti tiene características especiales que lo definen y son bien explicadas por Glenn Ward: consisten en experimentación, innovación, individualismo, originalidad, uso y combinación de diversas técnicas, empleo de elementos y productos de la pop culture y uso de colores artificiales. Así es el graffiti hoy en día.

En fin, si bien el graffiti es un arte, hay quien lo asocia con dibujos desagradables realizados por delincuentes. En una sencilla encuesta que realicé, el 25% de los encuestados (50 personas) me respondió que consideraba al graffiti como “vandalismo”, aunque el otro 75% me respondió que lo consideraba un “arte”.

En el año 2013, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática realizó una encuesta que arrojó el dato de que 7.5% de los hogares fueron víctimas de un acto vandálico durante ese año que implicaban graffitis en sus casas o pinta de bardas o vehículos. Este 7.5% equivale a un número de dos millones 339 mil 447 hogares con una cantidad de tres millones 758 mil 151 de actos vandálicos.

El graffiti es una expresión artística; los garabatos que realizan los delincuentes, aunque se realicen con el característico elemento del graffiti que es el aerosol, no pueden ser considerados graffiti.

Por ello, estimo importante distinguir entre el graffiti y los garabatos que realizan los delincuentes. El graffiti es una expresión artística; los garabatos que realizan los delincuentes, aunque se realicen con el característico elemento del graffiti que es el aerosol, no pueden ser considerados graffiti porque no tienen ninguna intención de manifestar arte, sino simplemente de expresar mensajes violentos u ofensivos en lugares públicos o en propiedad privada.

Lo malo es que las autoridades de los distintos Estados cada vez se colocan en una postura más represiva entorno al graffiti. La legislación penal que lo cataloga como vandalismo es dañina tanto para los artistas graffiteros como para la comunidad que ha aprendido a apreciarlo.

En lo que corresponde a todo el territorio mexicano, esta actividad artística es un delito. El Instituto de Investigaciones Parlamentarias del Congreso del estado de Tamaulipas realizó un estudio comparativo de las legislaciones penales de todas las entidades federativas para determinar si tienen regulado al graffiti.

La legislación penal que lo cataloga como vandalismo es dañina tanto para los artistas graffiteros como para la comunidad que ha aprendido a apreciarlo.

Si bien no está tipificado el delito de graffiti como tal en todas las entidades federativas, la actividad encuadra en el tipo penal de daño en propiedad ajena. Por ello, sigue siendo un delito en cada uno de los estados de la República.

En el Distrito Federal, de acuerdo a la Ley de Cultura Cívica y al Código Penal, la pena por el delito va desde los seis meses hasta los dos años de prisión. De acuerdo a la Secretaría de Seguridad Pública del D.F., ciento cincuenta jóvenes son acusados por este delito y remitidos a un Juez de lo Civil por año, aproximadamente. Incluso cuentan con una Unidad Antigraffiti.

De acuerdo a la Secretaría de Seguridad Pública del D.F., ciento cincuenta jóvenes son acusados por este delito y remitidos a un Juez de lo Civil por año, aproximadamente. Incluso cuentan con una Unidad Antigraffiti.

Además, justo en este año, el Congreso del estado de Puebla, México, aprobó la llamada Ley Graffiti que reforma el Código Penal de dicho estado, tipificando como delito al graffiti e imponiéndole una pena al delincuente de hasta seis años de prisión y/o servicio comunitario, además de la obligación de responder pecuniariamente al “afectado”. Todo parece apuntar a que los demás estados buscarán replicar esta Ley, ya que tuvo mucha aprobación por parte de las autoridades.

No obstante, aún con todos los problemas que ha encontrado durante su evolución y con todos los obstáculos que le ha impuesto la legislación penal, es improbable que el graffiti desaparezca en un futuro cercano.

Más bien, estimo que seguirá creciendo como una forma de arte válida en todo el mundo. Prueba de ello, es el colectivo mexicano de graffiteros llamado Rexiste, cuyo lema es “existo porque resisto”. Rexiste ha tomado mucha popularidad en todo México por sus elocuentes y especialmente elaborados graffitis que realizan como forma de protesta contra el Gobierno de México. Se han vuelto tan famosos, que los mencionan ya en la prensa estadounidense, británica, francesa, entre otras.

¿Es el graffiti una forma de arte o una forma de vandalismo?

Y ustedes, ¿qué opinan? ¿Es el graffiti una forma de arte o una forma de vandalismo?

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FUENTES DE INFORMACIÓN:
• Manco, Tristan. Stencil Graffiti. Estados Unidos: Thames and Hudson, 2002.
• Beard, Ricardo. El graffiti: una forma de arte incomprendida. España: Cultura Colectiva, 2012.
• Instituto de Investigaciones Parlamentarias. Comparativo de las entidades federativas que tienen regulado al graffiti en su legislación. México: Congreso del estado de Tamaulipas, 2008.
• Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática. Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad Pública. México: INEGI, 2013.
• Ward, Glenn: Postmodernism. Inglaterra: NTC Publishing Group, 1997.

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