No me olvido de Don Fernando Elizondo #BroncoConFE

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Estos últimos días hemos sido testigos de interesantes acontecimientos políticos en el Estado. La fecha tan anhelada llegó…¡y de forma muy especial! Primeramente, presenciamos una toma de protesta directa y recalcitrante, pues Jaime Rodríguez “el Bronco” con todo y la presencia de la bancada priísta, el propio gobernador saliente Rodrigo Medina de la Cruz y el enviado presidencial Miguel Ángel Osorio Chong, pronunció un discurso interrumpido en muchas ocasiones por prolongados aplausos y expresiones de apoyo de todo tipo; y es que “El Bronco” no hizo más que transmitir lo que muchos neoleoneses sentimos: una aberración generalizada por la clase política hasta ese entonces gobernante, así como la indignación por recibir un Gobierno Estatal destrozado e hipotecado.

“El Bronco” no hizo más que transmitir lo que muchos neoleoneses sentimos: una aberración generalizada por la clase política hasta ese entonces gobernante, así como la indignación por recibir un Gobierno Estatal destrozado e hipotecado.

Posteriormente “El Bronco” se trasladó del Congreso del Estado al Palacio de Gobierno con vestimenta propia de su personalidad y de manera muy lenta para poder devolver las muestras de afecto que recibía. Una vez llegado al Palacio, se dispuso a cambiar de vestimenta nuevamente, y a colocar un anuncio con una crítica directa a su antecesor, sobre la famosa silla del gobernador, ordenando que sea retirada y colocada como pieza de museo, junto con el famoso escritorio del despacho del gobernador.

La primera acción de gobierno de “El Bronco” fue la de designar a los CC. Manuel González y Cuauhtémoc Antúnez, como Secretario General de Gobierno y Secretario de Seguridad Pública respectivamente. Con posterioridad y gradualidad se anunciarían los ocupantes de los demás cargos de la administración pública estatal, esta pendiente al día de hoy el cargo de Procurador, debiendo ser aprobado por mayoría por el Congreso del Estado.

Echando un vistazo al equipo de “El Bronco”, me atrevo a decir que el más esperado por la ciudadanía junto con el de Procurador —por aquello de “Los Medina”— es el de la ya muy anunciada Coordinación Ejecutiva. Y es que no olvidemos que esta nueva posición en la administración pública estatal es de reciente creación, la cual surge precisamente como uno de los puntos fundamentales de la “Alianza por la Grandeza de Nuevo León”, aquel acuerdo suscrito por ese entonces por los candidatos a la gubernatura del Estado, Jaime Rodríguez “El Bronco” y Don Fernando Elizondo.

No olvidemos que esta nueva posición en la administración pública estatal es de reciente creación, la cual surge precisamente como uno de los puntos fundamentales de la “Alianza por la Grandeza de Nuevo León”.

Si recordamos el propósito de esta “Alianza”, surge precisamente de situaciones que en esa fase electoral se encontraban en la mente de los electores: (i) la previsible división del voto entre ambos candidatos, afectando directamente a “El Bronco” quien se ubicaba en una mejor posición que la de Don Fernando; (ii) y la consecuencia del primer punto, una amenaza de que quien ganara la elección para gobernador no fuera alguien que representara la intención de apuntalar un gobierno ciudadano.

Esta acción entre ambos candidatos implicaba que Don Fernando abandonara su aspiración por la gubernatura, declinando a favor de “El Bronco”, y comprometiéndose a apoyar el proyecto de éste. Dicha situación fue recibida de diferente manera por la sociedad, pero no cabe duda que la mayoría de los que nos sentíamos más identificados con la propuesta de gobierno de Fernando Elizondo, apoyamos sin dudar mucho a la opción política que “El Bronco” representaba.

Es probable que si este espaldarazo de Don Fernando a “El Bronco” no se hubiera dado, precisamente hubiera dado lugar al dilema del voto útil: o voto por el mejor o voto por el que puede ganarle al partido en turno; además de que esa expectativa de tener una gran posibilidad para que un gobierno ciudadano al fin llegara a Nuevo León —la cual no sentimos cuando el candidato del Partido Encuentro Social declinó a favor de “El Bronco”— al fin era plausible. Por ello, tengo que reconocer y agradecer la decisión de Don Fernando de realizar este gesto en favor de quienes nos perfilábamos a enfrentar ese dilema. Y es que como ciudadanos de este gran Estado, nuestro desencono hacia los dos partidos políticos dominantes en Nuevo León no permitía soportar otros seis años de pésimo gobierno.

Considero que las posibilidades de “El Bronco” de ganar —al cual no consideré nunca como mal candidato sino que no me sentía familiarizado con su peculiar sentido de gobernar, y al cual ya me estoy acostumbrando— se encontraban en evidente peligro, pues el riesgo de sufrir el “voto duro” y la operación política que se podía dejar venir el día de las elecciones por parte de la entonces candidata Ivonne Alvarez era cada vez más latente.

El resultado fue grandioso, un amplio margen en el que “El Bronco” acumulaba prácticamente más votos que la suma obtenida de por PRI y el PAN juntos, representando un triunfo contundente para “El Bronco”, el objetivo primario se había cumplido. Y en parte esto fue posible no tan sólo por que Don Fernando representaba la transferencia hacia “El Bronco” de la cuarta fuerza política que podía ubicarse como “fiel de la balanza” en la elección, sino que además una buena parte de los “votantes indecisos” que conformaban al menos el 20% de los votos posibles según cualquiera de las encuestas levantadas, se pronunció al final por “El Bronco” sabiendo que no estaba solo, sino que arropado y acompañado por nada más y nada menos que de Don Fernando Elizondo.

Este gesto de Don Fernando no fue aislado, sino que fue recíproco de parte de “El Bronco” pues éste último se prestó a apoyar a todos los candidatos de Movimiento Ciudadano, favoreciendo en mucho que éste último obtuviera una alta votación en las demás candidaturas existente de esta fuerza política y específicamente posicionándolo como la tercera fuerza del Congreso del Estado. “El Bronco” además de estar bien acompañado por Don Fernando, tenía ahora a tres grandes “bronco-diputados”: el contundente Jorge Blanco, la reconocida Concepción Landa y el audaz Samuel García.

Concretamente hace unos días vimos como se presentaba una iniciativa para incluir la figura de la Coordinación Ejecutiva prometida en campaña a los nuevoleoneses, la cual salió “raspada” al incluírsele un candado de que quien fuese propuesto a ésta posición gubernamental, debía ser refrendado por la mayoría del Congreso.

Justamente antier se dio la comparecencia de Don Fernando en el Congreso del Estado, en la cual se le formularon muchas preguntas, algunas muy “picosas” pero todas sorteadas sin problemas, las cuales dejaban entrever que la aprobación hacia Don Fernando para ocupar la clave posición de la Coordinación Ejecutiva era casi un hecho, pues no se recibió ninguna expresión directa de rechazo, y además se le reconoció su amplia trayectoria profesional.

Consolidándose esa promesa de campaña: la de tener a Don Fernando en esa posición clave del nuevo Gobierno Estatal para, como dicen algunos, “hacer que lo imposible se haga posible”.

Ayer en el Congreso del Estado, al someterse a votación el punto de la propuesta de Don Fernando para tomar la Coordinación Ejecutiva, todos los legisladores de manera unánime se pronunciaron a favor de que Don Fernando ocupara esta posición. Con esto se daba paso a la toma de protesta de Don Fernando Elizondo Barragán ante el Congreso del Estado, y momentos más tarde ante el ahora Gobernador Jaime Rodríguez “El Bronco”, consolidándose esa promesa de campaña: la de tener a Don Fernando en esa posición clave del nuevo Gobierno Estatal para, como dicen algunos, “hacer que lo imposible se haga posible”.

Ahora estoy contento —mas no satisfecho—, pues se ha concretado esa imagen que nos forjamos muchos electores durante la última fase de campaña, una dupla en la que tanto “El Bronco” como Don Fernando cuentan con experiencia en el sector público, preparación profesional, y lo más importante, con todas las ganas del mundo de llevar por buen camino al Estado. Si bien ambos cuentan con personalidades muy distintas que ya todos conocemos, si ellos se lo proponen, pueden ser correctamente encausadas, resultar complementarias y dar a Nuevo León mucho, lo que nos merecemos todos: EL MEJOR GOBIERNO QUE EL ESTADO HAYA TENIDO EN TODA SU HISTORIA.

#GraciasDonFernando, de parte de un #BroncoConFE; no nos fallen.

Espero como ciudadano no equivocarme con este buen augurio que siento por ambos. Pero mientras tanto #GraciasDonFernando, de parte de un #BroncoConFE; no nos fallen.