Esta mañana, el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, frente al presidente, López Obrador, insistió en denigrar la figura de Emilio Lozoya, quien lo ha señalado de haber recibido sobornos millonarios de la constructora Odebrecht para aprobar la reforma energética.
“No se puede creer en la palabra de un delincuente confeso y hoy doy la cara aquí y ante la autoridad”, ha dicho. “Sus declaraciones valen lo que su prestigio: nada“, ha señalado el gobernador.
“Por mi parte no tengo nada que temer, nada de que avergonzarme y nada que ocultar. No había necesidad de darme dinero para obtener un voto que ya se tenía por convicción personal (…) los dichos de Lozoya son una infamia “, ha insistido a dos metros de Obrador el gobernador.
De acuerdo a Domínguez, las acusaciones contra él por haber recibido millonarios pagos durante su etapa en la que fue senador del PAN son ataques políticos por su buen desempeño al frente de Querétaro. “No se puede creer a un delincuente confeso y detrás de esto hay una intención política. Atacan a un gobernador de oposición bien calificado“, ha insistido.
Domínguez se ha colocado en el centro del debate desde que el domingo pasado se conoció un vídeo filtrado en el que se ve a su secretario particular recibiendo varias maletas de dinero de un supuesto funcionario de la empresa pública Petróleos Mexicanos en lo que parece ser una oficina del Senado. A pocas horas de esto, Dominguez cesó al funcionario y dijo que desconocía sus manejos, lo que fue interpretado como una aceptación tácita de que las imágenes difundidas eran reales, lo que dio argumentos a López Obrador para criticar con dureza la corrupción rampante en el país hasta su llegada.
Pese a la enérgica defensa del gobernador, el problema se ha extendido luego de que este martes se dio a conocer una nueva filtración de la prensa con detalles de un segundo pago. Se trataría de una nueva entrega de 84 millones de pesos (casi cuatro millones de dólares) efectuada entre abril y julio de 2014, un dinero que vendría de Luis Meneses Weyll, el responsable de Odebrecht en México.
En dichas acusaciones se relata que el exdirector de Pemex entregó 164 millones de pesos, en dos pagos a distintos legisladores panistas, entre ellos: Domínguez, Ernesto Cordero y Ricardo Anaya. Del mismo modo, se menciona a Luis Vega, encargado de finanzas del PRI y al gobernador de Puebla Miguel Ángel Barbosa, miembro destacado de MORENA quien ha rechazado también las acusaciones.