La Auditoría Superior de la Federación (ASF) señaló que la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) no acreditó que se hayan realizado trabajos vinculados al proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), por lo que determinó un probable daño al erario de 14.6 millones de pesos por parte de la Uni.
Las anomalías detectadas incluyen servicios y entrega de bienes que no fueron comprobados; irregularidades en la contratación de personas físicas, así como en los choques y cobro de los cismo para el pago de estímulos, y comprobantes de gastos menores que no coinciden con las actividades, entre otras.
Los 14.6 millones de pesos son el total de pagos que la UANL recibido en el 2018 de un convenio firmado un año antes por 26.2 millones de pesos con el Grupo Aeroportuario de la CDMX (GACM), para ejecutar, a través de su Facultad de Arquitectura, el salvamento arqueológico al interior del Lago de Texcoco en su zona oriente, proyecto que incluía labores de supervisión, vigilancia y excavación.
Pese a que aseguró contar con capacidad para ello, la UANL subcontrata personal que no cumplía con el perfil, por 3.1 millones de pesos, así como a la empresa Gonvicgar, que recibió pagos por 2.3 millones, y cuyos trabajos y servicios no fueron acreditados.
“Se determinó que existieron inconsistencias e irregularidades relativas al pago de las personas físicas que se integraron para la comprobación de los recursos, así como no existe evidencia de que se haya realizado la prestación del servicio”, se lee en el dictamen de la ASF.
De acuerdo a la información proporcionada por la ASF, 36 personas físicas contratadas por la UANK, sólo siete tenían relación con la carrera de Arqueología y 29 no se vinculaban a los trabajos.
Otras anomalías reportadas es la entrega no corroborada de suministro astros y equipo, inconsistencias en los recibos de pago y en las firmas de las pólizas, cheques que no fueron entregados a sus beneficiarios y fueron cobrador por otras personas o depositados a la empresa subcontratada.
La ASF informa que a partir de visitas y entrevistas al personal al que se reportaron pagos, hubo quien rechazó haber realizado trabajos para la UANL.
La ASF determinó también dar vista al SAT para auditar a la UANL, a Gonvicgar y a tres personas físicas.