El senador por Nuevo León de Movimiento Ciudadano, Samuel García, publicó un video en sus redes sociales, por medio del cual insistió en ofrecer una disculpa por la actitud machista que mostró durante una conversación con su esposa, la influencia Mariana Rodríguez.
En la grabación que tiene una duración de poco menos de 4 minutos, y que tituló como “El Machismo es el cáncer de México”, García insistió en señalar como lo hiciera en varios mensajes que compartió previamente en su cuenta de Twitter, que las palabras que dirigió a su pareja fueron incorrectas, por lo cual reiteró sus disculpas.
Por otro lado, lamentó que por su culpa, este lunes 10 de agosto en lugar de recibir felicitaciones por su cumpleaños, Mariana Rodríguez lleve de mensaje de apoyo, el senador extendió su disculpa para todas las mujeres, por lo cual se comprometió a trabajar para cambiar sus actitudes y continuar con el apoyo que afirmó, ha dado a los derechos de las mujeres en el país.
“A todas las mujeres, una sincera disculpa. Me queda solamente ponerme a trabajar el triple por esta causa”, indicó García.
En el video, el emecista aceptó que las palabras que dirigió a su esposa en la transmisión de Instagram del pasado fin de semana, exhiben su comportamiento retrógrada, sobre el que dijo, son “telarañas” con las que carga debido a que nadie le “enseño a ser feminista”.
Por ello, el senador se comprometió a que en adelante se enfocará en erradicar las posturas que impliquen violencia de género, pues si bien volvió a señalar que lo ocurrido se trató de una broma, añadió que el machismo estuvo latente en sus palabras.
“Pero me comprometo profundamente a cambiar, a reeducarme, a reconvertirme porque no hay justificación. Aun la broma, es machismo y yo no quiero ver eso en mis hijas, en mi familia y lo que venga”, dijo.
Además, ofreció disculpas a su partido, Movimiento Ciudadano, en especial a todas las mujeres que forman parte de él, ya que dijo, las “metido en broncas” e inclusos les pidió ayuda para comprender los temas relacionados con la violencia de género, por lo cual suplicó que lo inviten a talleres y cursos que le permitan cambiar sus actitudes.
“Ya me cansé de este tipo de errores y fallos, de una cultura patriarcal, machista, que no sé cómo agarré pero estoy convencido que quiero ya sacar”.
Aseguró que no es machista ni intolerante, ya que señaló que las mujeres con las que convive, madre, hermanas, amigas, y compañeras, saben que siempre ha manifestado su descontento por la persistente problemática derivada del machismo en México, el cual calificó como “el gran pecado capital del país”.