Eso de “Frida Sofía” fue pantomima desde el principio.- Madre de familia

Comparte este artículo:

Una madre de familia del Colegio Enrique Rébsamen, que quedó colapsado tras el terremoto de magnitud 7.1 del martes en el sur de la capital mexicana, deploró este jueves el caso de la inexistente niña Frida y calificó de pantomima toda la historia.

La mujer contó que su esposo, aprovechando el conocimiento que tenía de la escuela, entró al edificio colapsado la madrugada de este jueves junto con otras personas “y ya no se detectó vida”.

Recordó que a las tres de la mañana encontraron el cuerpo de una maestra, “que ya sabían que estaba ahí”, pero “querían sacar gente viva para colgarse una medalla”.

El esposo de Luz prácticamente forzó su acceso a la zona y posteriormente a la escuela y, al ser padre de familia, llegó para orientar a los rescatistas y ofrecer datos del lugar.

La afectada exigió que los elementos del Ejército se retiren de la escuela y presten su ayuda donde más se necesite, además dijo que los dueños de la escuela no han huido y son personas comprometidas con la comunidad.

Además se mostró escéptica sobre la cantidad de edificios, unos 40, que las autoridades dicen que resultaron afectados en la capital mexicana.

El sismo de magnitud 7.1 en la escala de Richter se registró a las 13.14 hora local (18.14 GMT) del martes, poco antes de que concluyera la jornada escolar.

Según el balance más reciente de víctimas, 273 personas perdieron la vida y más de 100 permanecen desaparecidas en la capital mexicana y varios estados aledaños, donde centenares de edificios se desplomaron por el movimiento telúrico.

Atzala el municipio en el que el sismo inunda a una familia durante un bautizo.

Comparte este artículo:

El sismo le quitó a las familias Torres Escamilla y Villanueva a 11 de sus integrantes cuatro eran niños.

La fuerza del sismo derribó la iglesia de Santiago ubicada en Atzala un pequeño municipio de la Mixteca Poblana de no más de 1,300 habitantes cuando bautizaban Elideth Torres. Sólo tenía dos meses de vida.

El sismo del pasado 19 de septiembre también tiró las torres de la simbólica iglesia de los Remedios en el corazón de Cholula, y derrumbó cúpulas y torre en el ex convento de Huaquechula, el segundo más antiguo de América.

El reporte oficial informa que el sismo dejó 43 muertos entre ellos 11 en Atzala, 7 en la capital poblana, y 4 en Atlixco; 105 heridos en todo el estado y más de 230 personas damnificadas, pero la cifra sigue creciendo.

Pero fuera de los canales oficiales lo que se escucha es que la ayuda no ha fluido igual para todos, en Metepec, una junta auxiliar de Atlixco la queja es que no ha llegado el apoyo de víveres.

Vía redes sociales se organizan grupos para llevar agua, comida y medicina a la Mixteca poblana a alguno de los 18 municipios en donde se registraron daños, un corredor que va de Acatlán a Atlixco, pasando por Atzala, Chiautla e Izúcar de Matamoros.

En la capital poblana el sismo dañó al menos 46 inmuebles ubicados en el Centro Histórico. Dos personas murieron al caerles encima fragmentos de cornisas o de los inmuebles del primer cuadro.

En la preparatoria Lázaro Cárdenas, ubicada en el centro de la ciudad y que forma parte de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla dos personas murieron: Ana Paola de los Santos, alumna de la institución, y Maricela Celia Miranda, trabajadora administrativa.

La Secretaría de Educación del Estado informó que no habrá clases en el sistema educativo público hasta nuevo aviso.

También se anunció que la Junta de Conciliación y Arbitraje, la Procuraduría de Defensa del Trabajo y el Tribunal de Arbitraje suspenderán actividades para revisar los posibles daños estructurales a los inmuebles que ocupan.

Era su obligación y cumplió…

Comparte este artículo:

Después de un jueves largo y cansado llegamos al departamento, estaba a punto de dormir y a las  11:49 de la noche, se escuchó ese fuerte sonido, era la alerta sísmica, sin pensarlo tome mis cosas y comencé a descender por las escaleras, todos caminábamos muy tranquilos pero a prisa, como lo marcan los protocolos, cuando llegamos a la calle se podían escuchar los vidrios quebrándose, pude observar que la luz se había cortado y después de algunos segundos el sismo se detuvo y el susto fue pasando.

Después de un jueves largo y cansado llegamos al departamento, estaba a punto de dormir y a las  11:49 de la noche, se escuchó ese fuerte sonido, era la alerta sísmica, sin pensarlo tome mis cosas y comencé a descender por las escaleras, todos caminábamos muy tranquilos pero a prisa, como lo marcan los protocolos, cuando llegamos a la calle se podían escuchar los vidrios quebrándose, pude observar que la luz se había cortado y después de algunos segundos el sismo se detuvo y el susto fue pasando.

Este 7 de septiembre hubo un hecho sin precedentes en nuestro país, un sismo de 8.2 grados en la escala de Richter que tuvo su epicentro en Tonalá, Chiapas. Hasta el momento se ha determinado que 95 personas fallecieron debido al movimiento telúrico por lo cual el Presidente de la Republica declaró 3 días de luto nacional.                                                                                    

Minutos después del terremoto, a las 12:08 a.m. para ser exactos, Enrique Peña Nieto emitió su primer comunicado a través de Facebook; a los 42 minutos del suceso, el Presidente da una rueda de prensa con gran parte del gabinete en las instalaciones de Centro Nacional de Prevención de Desastres. Ahí comentó los hechos y compartió la información que tenía el gobierno de la república sobre el sismo. En esa rueda de prensa comunicó la decisión de suspender las actividades académicas en los estados de Chiapas, Tabasco y Oaxaca con el fin de salvaguardar la integridad de los estudiantes hasta que se pudiera determinar el estado físico de las escuelas.

Al día siguiente, el Presidente recorrió las zonas afectadas de Juchitán de Zaragoza en Oaxaca. En las imágenes de diversos medios informativos se puede ver a un mandatario cercano a la gente, escuchando las necesidades y, lo más importante, dando instucciones a los Secretarios de Estado para resolver las problemáticas de la población. La destrucción fue tanta que el New York Times publicó un ártículo que llevó por nombre “Juchitán golpeada por el terremoto: ‘Es como si la ciudad hubiera sido bombardeada'” La pronta respuesta del Gobierno Federal, la coordinación evidente y el apoyo inmediato del ejército mexicano es la más fehaciente prueba del liderazgo efectivo del presidente en esta nación.

Nuestro presidente ha sido muy criticado en distintas situaciones, la mayoría de ellas sin argumento sólido; simplemente, pareciera que siguen tendencias generadas por la desinformación de las redes sociales.

Pero lo que se percibió este fin de semana fue diferente, Peña Nieto estuvo al frente de la nación; su discurso acertivo, sus acciones congurentes y su liderazgo evidente. Con esta columna no pretendo elogiarlo, solo deseo reconocer que en los momentos de crísis e incertidumbre tuvimos a un presidente firme y con decisión.

Vale la pena mencionar que Trump se tardó 4 días para llegar a la ciudad de Houston despues del huracán “Harvey” y a pesar del tiempo fue reconocido por los ciudadanos.

Lo que hizo Peña Nieto no es ajeno a sus responsabilidades, es su obligación y la cumplió. Con su presencia y su discruso apoyó y dio confianza al pueblo mexicano cuando más la necesitaba. Es lamentable que tenga que pasar una tragedia de esta magnitud para observar la empatía, la decisión y la acción de nuestro presidente.

Es válido criticarlo, pero tiene más valor reconocer las decisiones acertadas que ha tomado. Tiene más valor, reconocer lo positivo que ha realizado. Tiene más valor, construir y engrandecer a nuestra nación que el  buscar dividir y destruir. Nuestro país necesita que todos nos sumemos a un mejor proyecto de nación; debemos entender que si no somos nosotros los que trabajemos por nuestro México, nadie lo hará.

Cuando subimos al departamento después del sismo observamos que no todo estaba en su lugar, pero eso no importaba porque estábamos bien…estábamos vívos. Al día siguiente, al despertar, vímos el gran desastre que causó este terremoto, mucha gente sin hogar y eso nos ayudó a valorar lo que tenemos.

Y como siempre,
Se vale debatir…