Daniel Ortega, presidente izquierdista de Nicaragua asumió este lunes su quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa Rosario Murillo como vicepresidenta.
Ortega juró respetar la Constitución y las leyes de su país en una ceremonia oficial celebrada en la Plaza de la Revolución, en Managua, donde recibió la banda presidencial del titular del parlamento, Gustavo Porras.
En el evento se contó con la presencia de los presidentes de Cuba, Miguel Díaz-Canel; de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Honduras, Juan Orlando Hernández, así como otros representantes internacionales, entre ellos de China, Irán y Rusia.
En su discurso inaugural, Ortega se pronunció en contra de las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea, felicitó al presidente de Honduras por estar presente y aseguró que se requiere “coraje” para estar en Nicaragua.
Tras unas elecciones cuestionadas por la mayoría de la comunidad internacional y en medio de la convocatoria de protestas por parte de organizaciones opositoras en varios países, Daniel Ortega inició este lunes su quinto mandato de cinco años como presidente de Nicaragua.
La comunidad internacional ha criticado duramente el proceso electoral de Nicaragua, calificándolo de «antidemocrático», «ilegítimo» y «sin credibilidad». Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se refirió a los comicios como «pantomima».
Ortega se enfrentó con unos partidos políticos tildados de «colaboracionistas», con más de 30 líderes opositores presos, entre ellos siete precandidatos presidenciales.
Al terminar este mandato, Daniel Ortega sumará 20 años consecutivos en el poder y un total de 29 años en el gobierno, lo que representa un caso inédito en la reciente historia de Nicaragua y en la América Latina actual.
(Fuente: Luis Cárdenas MX)