Los padres de los dos surfistas australianos que fueron asesinados la semana pasada en México, junto a otro ciudadano estadounidense, expresaron este miércoles su deseo de llevar los cuerpos de sus hijos “a casa”.
“Nuestros corazones están rotos y el mundo se ha convertido en un lugar más oscuro para nosotros” dijo Debra Robinson, madre de las víctimas Jake y Callum, en una rueda de prensa, retransmitida por el canal público australiano ABC.
“Ahora es momento de llevarlos a casa con su familia y amigos y las olas del océano en Australia”, remarcó entre llantos la madre de los dos surfistas australianos desde la ciudad estadounidense de San Diego.
Debra y su marido Martin Robinson comparecieron ante los medios por primera vez tras viajar el pasado fin de semana México para reconocer los cadáveres de sus hijos, que aún permanecen en el país latinoamericano.
Los progenitores expresaron su orgullo por los logros académicos y deportivos de sus hijos, así como por las virtudes personales, y agradecieron el apoyo de la gente y del Gobierno australiano, en especial a la ministra de Exteriores, Penny Wong.
El 27 de abril, la madre denunció la desaparición de los hermanos Robinson y su amigo estadounidense Jack Carter Rhoad al conocer que estos no habían llegado a su alojamiento en Rosarito, en Baja California, una de las paradas que formaba parte del viaje del trío por la costa occidental mexicana para practicar surf.
Tras un vasto operativo de búsqueda, las autoridades mexicanas descubrieron calcinado el vehículo en el que viajaba el trío y sus tiendas de campaña abandonadas cerca de Ensenada, en el noroeste de México.
El viernes pasado, las autoridades mexicanas informaron del hallazgo de tres cuerpos en un acantilado en el poblado de Santo Tomás, cerca de Ensenada, y el domingo confirmaron las identidades de las víctimas.
Conforme a la hipótesis de la Fiscalía General del Estado de Baja California, los dos hermanos australianos y el estadounidense se habrían opuesto al robo de su vehículo, lo que les habría costado la vida.
La Fiscalía, que no descarta que el crimen esté vinculado a los carteles de la droga que operan en el área, agregó que las víctimas presentaban “orificio por arma de fuego en la cabeza”.
Las autoridades mexicanas han acusado a Jesús Gerardo García Cota, alias ‘El Kekas‘, por el delito de desaparición forzada de los tres turistas, mientras que su hermano, Christian Alejandro, y una mujer identificada como Ari Grisell Silva Raya se encuentran detenidos a la espera de que se formulen cargos en su contra, agregó la ABC.
(Fuente: EFE)