La administración de Donald Trump amplió los criterios para que los inmigrantes que buscan obtener la ciudadanía estadounidense tengan que probar su “buena conducta moral”.
De acuerdo con especialistas en derecho migratorio, esta medida introduce más incertidumbre en el proceso de naturalización.
El documento, distribuido el viernes, ordena a los funcionarios adoptar un enfoque más “holístico” para determinar si un solicitante es “digno de asumir los derechos y responsabilidades de la ciudadanía estadounidense”.
“La ciudadanía estadounidense es el estándar de oro de la ciudadanía: solo debería ofrecerse a lo mejor de lo mejor del mundo”, señaló en un comunicado Matthew J. Tragesser, vocero de USCIS.
Aunque la exigencia de demostrar buena conducta moral ha sido parte del proceso de naturalización desde hace décadas, expertos aseguran que la nueva redacción del memorando eleva las cargas para los solicitantes. Emily Ryo, profesora de Derecho y Sociología en la Universidad Duke, advirtió que este “mandato probablemente introduzca un alto grado de incertidumbre, imprevisibilidad y carga administrativa”.
El memorando también fija requisitos más estrictos en casos específicos. Antes, quienes debían impuestos atrasados podían cumplir presentando un plan de pago con el IRS; ahora se exige el “pago completo” de las deudas y otras obligaciones, como la manutención de hijos.
Incluso faltas menores, como múltiples infracciones de tránsito o conductas clasificadas como “acoso o solicitud agresiva”, podrán considerarse falta de buena conducta moral.
Esta actualización se suma a otras acciones del Gobierno de Trump para endurecer los criterios de acceso a la ciudadanía o a beneficios migratorios. A finales de mayo, el Departamento de Estado ordenó suspender temporalmente entrevistas de visa para estudiantes internacionales para revisar sus redes sociales y detectar expresiones “hostiles hacia nuestros ciudadanos, cultura, Gobierno, instituciones o principios fundacionales”. Esa revisión, levantada poco después, fue ampliada nuevamente esta semana por USCIS para identificar actitudes “antiestadounidenses” en solicitantes de residencia o permiso de trabajo.