El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, se ha sumado este lunes a la petición de la oposición venezolana que exige a Nicolás Maduro frenar la convocatoria de unas elecciones constituyentes fijadas para el 30 de julio con unas reglas del juego que favorecen al oficialismo.
Al mismo tiempo, el Gobierno de Venezuela ha exhibido el apoyo mostrado por el mandatario ruso, Vladimir Putin, durante una conversación telefónica con Maduro. “El presidente Putin reconoció al presidente Maduro su coraje y esfuerzo en mantener la estabilidad y la paz del país”, señala un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores, que advierte además frente a “los intentos foráneos que se organizan contra Venezuela“.
La tensión entre los gobernantes de los dos países vecinos ha aumentado en las últimas semanas. El venezolano califico recientemente a Santos de “hipocrita” y “fracasado” y la semana pasada, aferrándose a la retórica del enemigo exterior, llegó a afirmar: “El presidente Santos me tiene que pedir la bendición, compadre, porque somos sus padres. Santos, pide la bendición, compadre”. “Inclínate, híncate ante tu padre. Soy tu padre”, prosiguió en referencia a los tiempos de la Gran Colombia. El mandatario colombiano rechazó entrar al trapo y se limitó a asegurar que los insultos de Maduro descalifican a todos los ciudadanos de su país.