El tema de la independencia catalana actualmente en boga por su relevancia mundial entre todas sus aristas, tiene al fútbol en un lugar privilegiado.
El lobby político realizado por el FC Barcelona dentro y fuera de España tiene un peso particular por lo que representa este club en el mundo. No es un club regional o nacional, es un club como un peso mundial y con millones de euros en patrocinios globales.
El Barcelona ha pedido a la Liga española garantías para jugar sus partidos. Contra Las Palmas, se decidió jugar a puerta cerrada por el riesgo que representa alguna invasión de parte de los aficionados.
Sin duda en las negociaciones con el gobierno en Madrid, dicho club figura como un agente importante debido al peso económico que tiene. Poco importa cómo va la tabla general, pero es importante ver el desarrollo de las jornadas para ver si esta crisis impacta de manera económica al club por las entradas perdidas.
Los sectores más radicales en Cataluña piden a la dirigencia del Barcelona salirse de la Liga y romper todo lazo con las dirigencias en Madrid.
Habrá que estar pendientes del desarrollo de las negociaciones y reacciones dentro del gobierno español. Al Barcelona no le conviene dejar la liga española por cuestiones de patrocinios. Existen múltiples actores que se verían afectados por alguna separación.
Las grandes instituciones del fútbol mundial como la FIFA y la UEFA (en el caso de Europa) apoyan a España y así será hasta que se determine la validez del referéndum.
El fútbol como industria se vería severamente afectado por una independencia catalana. Una industria entre tantas. Ver los movimientos y decisiones que tome el club tendrán un peso fundamental en el resultado final, ahí veremos quien o quienes dieron su brazo a torcer.
Lo dicho, dicho está.