Las armerías Smith & Wesson y Sturm, Ruger & Co, pidieron el lunes a un juez en Estados Unidos que desestime la demanda que les fue interpuesta por el Gobierno de México, por supuestamente facilitar el tráfico de armas a grupos del crimen organizado.
Los fabricantes de armas solicitaron anular también la indemnización que pide México por 10 mil millones de dólares.
Las armerías argumentaron en un escrito dirigido a la Corte Federal de Boston, en Massachussetts, que en su país las armas “no solo son legales, sino constitucionalmente protegidas”.
Las empresas, que también incluyen a Beretta USA, Barretta Firearms Manufacturing, Colt’s Manufacturing Co y Glock, Inc, comunicaron que México estaba tratando de usar los tribunales estadounidenses para eludir una disputa diplomática directa con Estados Unidos, aunque, de acuerdo con su texto, no tienen las facultades para hacerlo.