Los talibanes anunciaron su nuevo Gobierno provisional conformado por altos funcionarios del grupo militante, más de dos semanas después de hacerse con el poder de Afganistán. Un Gobierno oficial será anunciado más adelante, agregaron.
Mullah Mohammad Hassan Akhund, el poco conocido jefe del consejo de liderazgo de los talibanes, fue nombrado Primer Ministro interino, anunció el portavoz del talibán, Zabihullah Mujahed, en una conferencia de prensa en Kabul el martes. El cofundador de los talibanes, Mullah Abdul Ghani Baradar, la principal cara pública del grupo, será su adjunto y número 2.
Sirajuddin Haqqani, líder de la Red Haqqani, una organización designada como terrorista por Estados Unidos se desempeñará como Ministro del Interior interino.
Eso puede complicar cualquier movimiento de Estados Unidos para cooperar con los talibanes, particularmente cuando el presidente Joe Biden insta a los talibanes a cortar todos los lazos con los grupos terroristas.
No había indicios de no talibanes en los nombramientos, una gran demanda de la comunidad internacional.
Estados Unidos y sus aliados han estado observando si los talibanes formarán un Gobierno inclusivo que pueda estabilizar el país y evitar un regreso a la guerra civil.
Otras demandas incluyen la libertad de viajar para quienes quieren salir de Afganistán y los derechos de las mujeres, que enfrentaron una represión extrema cuando los talibanes ocuparon el poder por última vez a principios de siglo.
Para el nuevo Gobierno talibán, hay mucho en juego. Se están gestando signos de una crisis económica, con los precios de los productos esenciales subiendo en Kabul mientras los bancos se quedan cortos de efectivo.
Estados Unidos ha congelado aproximadamente 9 mil millones de dólares en activos que pertenecen al Banco Central de Afganistán y el Fondo Monetario Internacional impidió que el grupo utilizara los activos de reserva del fondo.
Las amenazas de seguridad regionales y más amplias ya se han producido en el aeropuerto de Kabul, donde un atentado suicida atribuido a una rama local del grupo terrorista Estado Islámico mató a casi 170 afganos y 13 militares estadounidenses en los últimos días de la caótica evacuación estadounidense de el país.
(Fuente: Bloomberg)