El fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, advirtió que llevará el Caso Cienfuegos ante autoridades internacionales, debido a que las pruebas recabadas por la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos “no servían para nada”.
En entrevista con Joaquín López-Dóriga para Radio Fórmula, el fiscal sentenció que “esto no se va a quedar así”, toda vez que, según acusó, la DEA intentó dejar en ridículo a México.
“¡Es el colmo!, en México nos están intentando descalificar a nosotros, a los mexicanos, a nuestras autoridades, porque no hicimos lo que ellos no quisieron hacer allá. Eso no tiene nombre”, recriminó.
Gertz Manero detalló que se buscará abrir el expediente completo del caso a fin de transparentarlo: solicitar todas las pruebas completas, de frente, y con la presencia y testimonio de autoridades internacionales.
“Retiran los cargos y nos dejan todo un expediente con pruebas que ellos mismos ya descalificaron. Ahora resulta que nosotros tenemos la culpa de una investigación que llevaron ellos en secreto durante ocho años y luego ellos mismos desestimaron sus propias acusaciones”, criticó.
Gertz Manero dijo que, entre las pruebas de la DEA, estaba el testimonio de dos narcotraficantes cuyas explicaciones sobre la identidad del supuesto funcionario con el que tenían nexos -señalado como el general Cienfuegos Zepeda- “si yo se las llevo a un juez me las va a aventar en la cara”.
Detalló que lo dicho por los delincuentes, asesinados años atrás, no coincidía con la fisonomía del exsecretario de la Defensa Nacional o con su modo de expresarse, ni siquiera con los sitios en los que se encontraba.
El titular de la FGR refirió que “no tiene nombre” el que la DEA detuviera al general Salvador Cienfuegos y hasta después informara a México que lo acusa de delitos presuntamente cometidos en territorio nacional, mismos que investigó en secreto durante ocho años.
“Luego salen sus incondicionales (de la DEA) a decir que los que tenemos la culpa de los ocho años, del fracaso de ellos de haber retirado sus acusaciones y haber armado esta cosa verdaderamente grotesca somos nosotros, porque no vamos a utilizar las pruebas que ellos desecharon”, reprochó.
Rechazó también que el presidente Andrés Manuel López Obrador le haya ordenado, por presión del Ejército mexicano, dejar en libertad al general Salvador Cienfuegos.
Y cuestionó que a la jueza federal estadounidense Carol Amon no le haya llamado la atención que la DEA solicitara desestimar los cargos de narcotráfico contra Salvador Cienfuegos.
“Cuando nosotros extraditamos a alguien, no lo exculpamos de los delitos que cometió aquí. Ellos exculparon y retiraron los cargos de este señor. ¿Y esto no le llamó la atención a la fiscal?”, dijo.
Para el fiscal Alejandro Gertz Manero, el no prestarse a llevar a cabo todo un procedimiento penal contra una persona exculpada y consignarla ante un juez lo ha llevado a ser víctima de un linchamiento político.
Expuso que desde que asumió la titularidad de la FGR la oposición busca su renuncia o remoción del cargo, aduciendo desde problemas de salud hasta ineficiencia.
“Hay una compulsión porque no pueda existir una estructura que trabaje con honradez, con transparencia y con decencia, no lo pueden tolerar”, afirmó.