Científicos de la Organización Mundial de la Salud advirtieron el lunes que este año no se alcanzará la inmunidad colectiva o de rebaño, a pesar de que en numerosos países se están administrando vacunas contra la covid-19.
Mientras tanto, Reino Unido inauguró el primero de sus centros de inoculación masiva en las principales ciudades, en una carrera por adelantarse a la rápida propagación de una nueva cepa de la enfermedad allí.
En el mundo, la pandemia ha infectado a más de 90 millones de personas y la cifra de fallecidos llega a 1,94 millones desde que China confirmó su primera muerte en la ciudad central de Wuhan, hace un año.
China ha logrado controlar en gran medida el virus, pero está haciendo frente a una serie de infecciones locales.
Más de medio millón de personas fueron puestas bajo confinamiento en Pekín el lunes cuando el gobierno impuso medidas estrictas para acabar con un puñado de casos.
Sin embargo, los contagios estaban aumentando en todo Europa y Reino Unido se enfrentaba a una nueva cepa de la enfermedad que podría provocar un nuevo colapso de los hospitales.
El domingo, Rusia confirmó su primer caso de la nueva cepa de covid-19, que podría ser mucho más contagiosa, según científicos.
El virus también explotó en Estados Unidos, el país más afectado, donde el presidente electo Joe Biden recibió públicamente su segunda dosis de la vacuna.
– “Las peores semanas” están por venir –
La compañía alemana BioNTech dijo que podría producir millones de dosis de su vacuna, más lo que esperaba inicialmente este año, aumentando la previsión de producción de 1.300 millones a 2.000 millones.
El anuncio de BioNTech, que se asoció con la empresa estadounidense Pfizer para producir la primera vacuna aprobada en Occidente, fue un estímulo para los países que luchan por conseguir dosis.
Pero la compañía también advirtió que la covid-19 “probablemente se convertirá en una enfermedad endémica”, y dijo que las vacunas tendrán que luchar contra la aparición de nuevas variantes virales y una “respuesta inmunológica natural menguante”.
Más tarde el lunes, la jefa de científicos de la de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Soumya Swaminathan, advirtió que llevaría tiempo producir y administrar suficientes dosis de vacunas para detener la propagación del virus.
“No vamos a alcanzar ningún nivel de inmunidad de la población o inmunidad de rebaño en 2021”, declaró Swaminathan en una rueda de prensa.
Además, insistió en la necesidad de mantener las medidas de higiene y de distanciamiento y el uso de mascarilla para atajar la epidemia de coronavirus.
Reino Unido, el primer país en aprobar la vacuna de Pfizer/BioNTech, abrió siete centros de vacunación masiva en el país el lunes.
“Las próximas semanas van a ser las peores semanas de esta pandemia”, advirtió el principal consejero médico del gobierno, Chris Whitty, a la BBC. “Lo que tenemos que hacer, hasta que las vacunas hagan efecto (…) es reforzar” el respeto de las restricciones, agregó.
India, el segundo país más poblado del mundo, en el que la covid-19 mató a 150.000 personas, se dispone a lanzar el sábado su colosal y compleja campaña de vacunación que busca inmunizar a 300 millones de sus 1.300 millones de habitantes.
En tanto, Rusia anunció que 1,5 millones de personas en el mundo se inocularon con su vacuna Sputnik V y que ahora contempla desarrollar una versión “light” que solo requeriría una inyección, aunque su eficacia sería menor, para aportar una solución temporal en algunos países.
– La ciudad “más segura” –
Mientras tanto, Sudáfrica cerró las fronteras terrestres durante un mes para contrarrestar un resurgimiento sin precedentes de casos alimentados por una nueva cepa de virus.
Las restricciones ya vigentes, como la prohibición de la venta de alcohol y las grandes reuniones, y el toque de queda durante la noche, permanecen.
El primer ministro de Portugal, Antonio Costa, dijo el lunes que un nuevo confinamiento era inevitable ya que el país sufría un número récord de muertes e infecciones por virus.
“Ciertamente nos enfrentamos a una tercera ola” del virus, dijo Costa a los periodistas.
Líbano decidió el lunes imponer un toque de queda total durante 11 días a partir del jueves y limitar los vuelos procedentes de países de alto riesgo en un intento de frenar la propagación del nuevo coronavirus.
Un equipo de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llegará finalmente esta semana a China para iniciar la investigación sobre el origen del coronavirus, más de un año después de su irrupción y en un contexto de aumento de casos en Europa y Norteamérica.
Acusado de intentar bloquear la investigación, Pekín confirmó este lunes que los 10 expertos de la OMS llegarán finalmente el jueves para realizar “investigaciones conjuntas con científicos chinos”, según un parco comunicado del Ministerio de Salud.
Estados Unidos y Australia han encabezado los llamamientos internacionales para que se realice una investigación independiente, enfureciendo a China.
El aniversario de la primera muerte reportada pasó casi desapercibida en Wuhan, donde los viajeros se desplazaban libremente para trabajar, y los parques y los paseos ribereños bullían de visitantes.
“Wuhan es ahora la ciudad más segura de China, incluso del mundo entero”, dijo a la AFP Xiong Liansheng, de 66 años de edad, residente en la ciudad.
Al otro lado del Atlántico, en México, que ocupa el cuarto lugar entre los países con mayor número de muertes y el segundo de América Latina, la pandemia ha dejado los hospitales en un estado “crítico”, con los paramédicos luchando incluso por encontrar camas para los pacientes.
“Para que haya capacidad de respuesta [en los hospitales se] tiene que dar de alta a uno o que se muera uno. Está cabrón [difícil], pero es la verdad”, dijo a la AFP Ángel Zúñiga, coordinador de socorros de la Cruz Roja de Toluca, a 40 kilómetros de la capital.
(Fuente: AFP)