Este lunes el Gobierno de México y la Iniciativa Privada acordaron eliminar los esquemas de subcontración laboral.
La iniciativa no sólo incluye el “outsourcing”, sino también el “insourcing”, un esquema basado en la creación de una empresa dentro de un mismo grupo para la administración de la nómina.
Cabe mencionar que en México se calcula que hay unas 4.5 millones de personas bajo outsourcing y en Nuevo León uno de cada cinco empleos formales podría verse afectado por la prohibición.
Tras una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador, el presidente de Concamin, Francisco Cervantes, señaló que el insourcing queda eliminado y están pendientes discusiones sobre el tope al reparto de utilidades y la fecha para la entrada en vigor de la reforma.
En la reunión también participaron el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CEE), Carlos Salazar; el presidente del Consejo Mexicano de Negocios, Antonio Del Valle, y José Manuel López Campos, presidente de Concanaco.
No se aclaró si fueron discutidas las penalidades propuestas por el Gobierno y la criminalización de la subcontratación.
Cabe recordar que industriales y expertos han lanzado advertencias sobre el contenido original de la iniciativa como, por ejemplo, que volverá burocráticas las contrataciones, que inhibirá la creación de nuevos empleos y que restará competitividad a las empresas.