Estados Unidos activó este 7 de agosto un nuevo esquema de aranceles que intensifica su estrategia comercial global. La medida, impulsada por el presidente Donald Trump, afecta tanto a países con acuerdos vigentes como a otros sin pacto, reactivando fricciones desde su regreso al poder en enero.
Los nuevos gravámenes, de al menos 15 % para países con déficit comercial con EE.UU., alcanzan a unas 40 naciones, como Venezuela, Bolivia y Costa Rica. Chile y Argentina enfrentarán un alza del 10 %, mientras que Brasil e India recibieron tarifas del 50 %. China consiguió una reducción temporal tras negociar con Washington.
Algunos socios lograron rebajas: la Unión Europea bajó de 30 a 15 %, Vietnam de 46 a 20 %, y México obtuvo una prórroga de 90 días. En cambio, Canadá ya aplica un arancel del 35 %. India enfrentará además un segundo arancel por importar petróleo ruso.
Trump justificó los ajustes como parte de su plan para reducir el déficit comercial. Sin embargo, las medidas aumentan la presión sobre varios aliados y podrían complicar el escenario global, mientras se espera un acuerdo con China antes del 12 de agosto.