El proyecto de reforma presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que otorga a la Secretaría de la Función Pública (SFP) la facultad de contratar bienes y servicios, fue aprobado por el pleno de la Cámara de Diputados.
La reforma, que implica una modificación a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, recibió 260 votos a favor de Morena, PT y PVEM, mientras que el PRI, PAN, PRD y MC votaron en contra, sumando un total de 215 votos, y se registraron dos abstenciones.
No obstante, la iniciativa generó críticas por parte de los legisladores de la oposición, quienes señalaron que la SFP no puede asumir la responsabilidad de contratar bienes y servicios y, al mismo tiempo, supervisar el uso adecuado de los recursos.
El diputado priista Javier Casique Zárate manifestó su preocupación por el potencial riesgo de corrupción al permitir que la SFP actúe como juez y parte en todas las adquisiciones del gobierno federal.
Además de la contratación de bienes y servicios, la reforma también otorga a la SFP la capacidad de «rediseñar» los Organos Internos de Control (OIC), a través de modificaciones en su estructura, y establece que sus titulares serán nombrados directamente.
Los OIC son los encargados de supervisar el gasto en cada dependencia y esta modificación también recibió críticas de los legisladores de la oposición, quienes señalaron que esto puede generar un riesgo grave, como el experimentado con el desabasto de medicamentos. El diputado de Movimiento Ciudadano, Omar Castañeda, denunció que la iniciativa presenta un riesgo gravísimo que podría provocar problemas en el futuro.