La Taquería

El PAN y el catolicismo

Comparte este artículo:

laicismo

El PAN fue fundado en 1939 y desde entonces, se ha alegado que es una institución vinculada a la Iglesia católica. Por supuesto, muchos de sus candidatos y electores son creyentes, pero no es de sorprender en un país donde el 80% de la población se declara católica.

En este artículo pretendo demostrar de manera breve la inexistencia de una inspiración religiosa en su fundación, así como en su desarrollo a lo largo de los años.

Lo hare mediante hechos y declaraciones de los arquitectos intelectuales y figuras del partido:

1) “don Manuel (…) quiso destacar una idea que después tuvo gran trascendencia: la necesidad de que el partido tuviera una integración pluralista, como un reflejo de la integración pluralista de la sociedad. Esta idea excluyó toda integración facciosa, religiosa o clasista del PAN y, de acuerdo con una concepción auténticamente democrática, sólo se requirió la coincidencia de principios básicos, que hicieran posible la unidad dentro de la diversidad”

2) “Gómez Morin (…) Desde un principio lo definió con claridad: el PAN sería un partido civil, incluso laico, sin definición religiosa alguna”

3) En entrevista concedida a los esposos James y Edna Wilkie entre 1964 y 1965, Cosío Villegas declaró: “Acción Nacional, contra lo que pueda creerse, no cuenta con ciertos apoyos (…) digamos, típicamente, la Iglesia católica… La Iglesia católica nunca le ha dado un apoyo abierto, ostensible, a Acción Nacional. Y dudo mucho que se lo dé, aún callada o silenciosamente.”

4) “No hay “bloques”, no hay papeles aprendidos de antemano para recitarse aquí, no hay ni puede haber sombra de coacción intelectual o moral, y menos aún de otros géneros.” La principal motivación del partido fue ofrecer una plataforma de auténtica representación política. Para lograrlo, era (y sigue siendo) indispensable el libre florecimiento de ideas (incluyendo por supuesto las religiosas, área que abarca los “otros géneros”).

5) El 17 de octubre de 1953 apareció en el Diario Oficial de la Federación un decreto en el que se anunciaba que las mujeres tendrían derecho a votar y ser votadas para puestos de elección popular. En ese entonces, la Iglesia católica en México sugería que las mujeres se apegaran a la tradición y no participasen en asuntos políticos. Contrario a lo establecido por la Iglesia, el PAN postuló a Norma Villarreal de Zambrano, quien se convertió en la primera alcaldesa de México, en San Pedro Garza García (1967-1969).

6) Recientemente, la Iglesia ha convocado a sus feligreses a manifestarse en contra del matrimonio igualitario. En una entrevista que Adela Micha realizó a Margartia Zavala hace un par de meses, se le preguntó su posición en torno al tema. La pre-candidata presidencial contestó: “Mira Adela, la Suprema Corte de Justicia ya se pronunció al respecto y dice que es discriminatorio prohibirlo, por lo que mi opinión está de más”. El senador y ex presidente de la Mesa Directiva, Roberto Gil Zuarth se pronunció a favor.

Es de resaltar el que prevalezca la distinción entre las opiniones personales y los asuntos de gobierno, más aún cuando se trate de un tema relacionado a los intereses del clero, siempre teniendo en mente la expresa laicidad del Estado en la Constitución. Para fortalecer esta laicidad, también se expresa en la Constitución la prohibición de establecer partidos políticos de afiliación religiosa.

Por lo tanto, en México, ni el PAN ni cualquier otro partido puede ser portavoz del Vaticano.

[1] Manuel González Hinojosa, Manuel Gómez Morin, El Político, Testimonios de la muerte de Manuel Gómez Morin, Editorial Jus, 1973

[2] Javier Garciadiego, Religión y Política en la Fundación de Acción Nacional, Letras Libres, mayo 2012

[3] Enrique Krauze, Convergencias Maderistas, Letras Libres, mayo 2012

[4] Informe a la Asamblea Constituyente de Acción Nacional, Manuel Gómez Morin, Constructor de Instituciones, Compilación y estudio introductorio de Carlos Castillo Peraza, Fondo de Cultura Económica, 1994

______________________________
– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”