El vocero de la estrategia gubernamental de México contra la COVID-19 rechazó este viernes que exista una cifra oculta de muertos por el virus en la capital del país, en respuesta a una investigación del diario estadounidense The New York Times.
El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, acusó de “falta de rigor” al diario, que sostiene que el gobierno de Ciudad de México tendría un conteo oculto de fallecidos cuyo número es “más de tres veces” la cifra oficial del gobierno federal.
“La discrepancia que pareciera querer encontrar esta nota estriba en la documentación precisamente de los casos de personas que fallecen con las características clínicas de COVID pero no han sido confirmadas”, dijo López-Gatell en un video difundido a través de sus redes sociales.
La cifra oficial de fallecidos en la capital mexicana hasta el viernes es de 696, según datos del gobierno local.
El funcionario explicó que el estado de gravedad en que muchos pacientes son hospitalizados impide realizar inmediatamente pruebas de laboratorio que permitan acreditar que padecen COVID-19, aunque sus condiciones así lo sugieran.
López-Gatell detalló que, para estos casos, el protocolo de vigilancia epidemiológica contempla realizar posteriormente un diagnóstico por dictaminación, basado en el expediente clínico y los antecedentes epidemiológicos del fallecido.
“Hemos explicado varias veces que aún faltan los casos que son diagnosticados o serán diagnosticados por dictaminación. Nuestra estadística todavía está en espera de contemplar ese dictamen porque es la mecánica rigurosa que sigue la vigilancia epidemiológica”, agregó.
El funcionario aseguró que las autoridades sanitarias conocen “todos y cada uno de los casos fatales” y que mantienen “una estrechísima colaboración” con la alcaldesa de Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, y todo su equipo.
López-Gatell dijo, en tanto, que le “llama la atención” que el artículo del periódico estadounidense apareciera “de manera casi sincrónica” con los de otros medios internacionales que cuestionan las cifras oficiales sobre el número de infectados de COVID-19 en el país.
Alegó además que estos recibieron “amplia difusión” en redes sociales por “individuos ligados a administraciones anteriores, a los negocios de la industria farmacéutica y de los insumos, en general de la industria de la salud”.
“Y unos cuantos también con aspiraciones políticas”, remató López-Gatell.
El gobierno de México, que hasta el viernes reportó 31.522 casos positivos y 3.160 defunciones por COVID-19, mantiene desde 2006 un modelo de monitoreo epidemiológico denominado “Centinela”, que permite rastrear enfermedades, pero no contempla la realización de pruebas masivas a la población.