En su primer día como presidente de Estados Unidos, Joe Biden firmó una orden ejecutiva para regresar a EU al Acuerdo de París, buscando así devolverle a Washington el liderazgo en la lucha contra el cambio climático, cumpliendo además una de sus más importantes promesas de su campaña electoral. Con esta firma se pone fin al retiro de uno de los acuerdos más importantes en cuanto al cambio climático, cuya salida oficial había sido el 4 de noviembre del año pasado, después de que el ya expresidente Donald Trump anunciara la salida de su país en junio de 2017.
De igual manera, el presidente Biden firmó un decreto con el que pone punto final a la construcción del muro fronterizo, una de las promesas de Trump durante su mandato y una de las fuentes principales de las desviaciones de recursos más grandes durante la presidencia del republicano. Lo anterior también incluyó la firma de una orden ejecutiva para salvaguardar el programa DACA (programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), asegurando así la instancia de unos 650 mil indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños, conocidos como “dreamers”.
El DACA fue lanzado en 2012 durante la presidencia de Barack Obama, cuando Biden fungía como vicepresidente; con el programa se buscaba la protección temporal contra la deportación de personas migrantes que hubieran llegado de niños a Estados Unidos. Si bien no se otorgaba una vía para obtener la ciudadanía, el DACA proporcionaba a los dreamers la posibilidad de permanecer en el país, obtener permisos de trabajo y, posiblemente, un seguro de salud ofrecido por sus empleadores.
Fuente: Semana