El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, dio a conocer el lunes un plan para brindar alojamiento a hasta dos mil migrantes en una isla ubicada en el río Este. En este mismo sitio, el año pasado se había instalado un centro de alojamiento para migrantes, el cual fue desmantelado en cuestión de semanas.
Según lo expresado por Adams, el estado se encargará de reembolsar a la ciudad los gastos operativos asociados a un campamento destinado a migrantes adultos en la Isla de Randalls.
«El constante aumento en el número de solicitantes de asilo bajo nuestra responsabilidad, que llegan en cientos cada día, ha llevado a nuestro sistema al límite y más allá. Encontrar camas suficientes cada noche se ha convertido en una tarea de proporciones gigantescas», comentó Adams en un comunicado de prensa.
Asimismo, Adams mostró su agradecimiento a la gobernadora Kathy Hochul y al estado de Nueva York por colaborar en la apertura de este nuevo centro de asistencia humanitaria, y por cubrir los costos asociados. También resaltó la necesidad de obtener apoyo financiero por parte de todos los niveles de gobierno. En varias ocasiones, Adams ha hecho un llamado al gobierno federal para que brinde mayor apoyo económico a los esfuerzos de acogida de migrantes en la ciudad de Nueva York.
La ciudad ha optado por alquilar hoteles con el fin de albergar a los migrantes y ha utilizado espacios como una terminal de cruceros y una antigua academia de policía para hospedar a las personas, ante la llegada de decenas de miles de solicitantes de asilo en el último año.
Actualmente, más de 57,200 solicitantes de asilo están bajo la responsabilidad de la ciudad, según informó Adams.
El mes pasado, funcionarios municipales anunciaron un proyecto para albergar a mil migrantes en el estacionamiento de un hospital psiquiátrico estatal en el distrito de Queens.
La semana pasada, las autoridades de la ciudad comenzaron a trasladar migrantes a los centros recreativos de dos parques en Brooklyn: McCarren y Sunset.
En octubre del año pasado, se instaló un centro de alojamiento para migrantes en la Isla de Randalls, en el río Este, entre los distritos de Manhattan, Queens y el Bronx. Sin embargo, tres semanas después, anunciaron el cierre del complejo de carpas debido a la disminución en el número de personas que eran trasladadas en autobús desde la frontera sur de Estados Unidos.