Tormentas dejan a unas 200 mil personas sin electricidad en Washington D.C.

Comparte este artículo:

Fuertes tormentas y vientos, que llegaron a soplar con una fuerza de hasta 140 kilómetros por hora, dejaron este sábado a unas 200 mil personas sin electricidad en Washington D.C., capital de Estados Unidos, y su área metropolitana según el portal especializado PowerOutage.US.

Las fuertes ráfagas de viento derribaron árboles y postes de electricidad tanto en Washington, como en los dos estados colindantes: Virginia y Maryland.

Según pudo comprobar EFE, en la localidad de Arlington, en el norte de Virginia, algunos árboles -arrancados de raíz- habían caído sobre vehículos y viviendas. Tras la tormenta, decenas de personas salieron a la calle a evaluar los daños y charlar con otros vecinos.

Daños similares se registraron en otras zonas del estado de Maryland y en Washington.

Tal fue el impacto del viento que el cementerio nacional de Arlington, donde EE.UU. entierra a sus veteranos de guerra, anunció en Twitter que retrasará su hora de apertura el domingo para poder limpiar los árboles caídos y las ramas.

En el cementerio de Arlington, es tradición que un soldado haga siempre guardia y desfile, fusil en mano, frente a la tumba del soldado desconocido en honor a aquellos desaparecidos en combate.

Pese a los fuertes vientos y la lluvia, el soldado que custodia la tumba siguió desfilando impasible, tal y como mostró el propio cementerio de Arlington en su cuenta de Twitter.

La tormenta provocó numerosos rayos y truenos, mientras que los vientos alcanzaron una velocidad de entre 96 y 140 kilómetros por hora, de acuerdo con el Servicio Nacional Meteorológico.

Las tormentas se produjeron después de varios días en los que la región registró temperaturas máximas de hasta 40 grados centígrados.

Según The Washington Post, varios vecinos del área consideran que la tormenta de este sábado es la peor desde otra que vivió el área de Washington en junio de 2012 con vientos de entre 96 y más de 129 kilómetros por hora, y que dejó a un millón de personas sin electricidad.

(Fuente: EFE)

Registra Estados Unidos casos de intoxicación por desinfectante tras dichos de Trump

Comparte este artículo:

El Centro para el Control de Envenenamientos de Nueva York recibió 100 llamadas por accidentes con productos desinfectantes en un periodo de cuatro días después de la sugerencia del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de usar, ingerir o inyectar estos productos para combatir al Covid-19, comparado con 28 casos en las mismas fechas del año pasado.

El pasado 23 de abril Trump sugirió, durante su conferencia diaria en Casa Blanca sobre el Covid-19 usar una inyección de productos de limpieza para combatir el virus, dejando atónita a la comunidad científica.

Ese día, el Centro de Nueva York recibió 21 llamadas que fueron relacionadas con el contacto con lejía y 11 para otros desinfectantes, lo que contrasta con el total de 6 llamadas para esa fecha el año pasado.

En otros Estados de EU también se reportaron aumento en llamadas por personas intoxicada, según reportaron autoridades en los Estados de Michigan.

La Gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer y del Estado de Maryland, Larry Hogan, incluso instaron a su población no seguir las medias sugeridas por Trump.

En cuanto a los datos del Centro en NY no especifican si el contacto con el producto fue en la piel o ingerido.

Las llamadas aumentaron el 24 de abril, al día siguiente de la sugerencia del Mandatario, registrándose 23 casos relacionados con el contacto con lejía, usada como desinfectante en millones de hogares, un consumo que además se disparó durante la pandemia y llegó a agotar en muchos establecimientos en el momento más alto de los casos.

Además, un total de dieciséis llamadas fueron en relación al envenenamiento con otros desinfectantes que no se especifican.

Sin embargo, el año pasado en la misma fecha el Centro solo recibió en total 10 llamadas de neoyorquinos.

El 25 y 26 de abril, tras el rechazo de la comunidad científica y de los fabricantes de productos de limpieza a la sugerencia del Presidente, se reflejó una reducción en los casos, con 16 y 5 casos respectivamente por contacto con lejía.

El año pasado para esos dos días, el Centro recibió un total de 11 llamadas.

…Y no asume responsabilidad

Por su parte, Donald Trump, negó tener una responsabilidad en el aumento de casos de envenenamiento por cloro reportados por los gobiernos de diversos estados, tras sus declaraciones al respecto la semana pasada.

En conferencia de prensa desde la Casa Blanca, un reportero preguntó a Trump su opinión sobre los reportes de aumento de casos de envenenamiento en algunos estados del país.

El mandatario respondió que “no puedo imaginar a qué se debe esto”.

Al ser cuestionado sobre si asume alguna responsabilidad por el incremento de casos reportados, Trump respondió que no.

(Fuente: EFE)

El Talón de Aquiles: “Realidades Alternativas”

Comparte este artículo:

El número de estadounidenses que dicen arrepentirse de haber votado por Donald J. Trump aumenta. Y es que lo menos que se puede decir es que las dos primeras semanas de la era Trump han sido intensas.

A mi me han hecho desear llegar al fin de semana, días que hasta el momento han sido “Donald-free”, y que me han permitido respirar y descansar de la cascada de pésimas noticias que llegan de lunes a viernes.

A decir verdad, el solo hecho de referirme al Presidente de Estados Unidos como el “hombre naranja” – jamás pensé hacer algo similar, en su respectivo color, con el expresidente Obama – indica la profunda crisis de credibilidad y de legitimidad por la que atraviesa Washington. Trump no genera respeto. Esta realidad alternativa impacta el mundo entero, iniciando naturalmente por América del Norte.




El 10 de enero, el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, procedió a un cambio de gabinete, entre los que resalta la salida del canciller Stéphane Dion, antiguo líder del Partido Liberal de Canadá (PLC), y conocido ecologista.

Sin duda, Ottawa recibió señales de que la nueva administración estadounidense se aprestaba a desbloquear la construcción de los oleoductos Dakota Access y Keystone Pipeline, por lo que, con un pragmatismo sorprendente, engavetó sus principios ecológicos para alinearse con la política de Washington.

Dion, quien estuvo a cargo de la cumbre sobre cambio climático de Montreal (2005), debe haber juzgado inaceptable el cambio. Claro, no todo fue pérdida para Dion: su premio de consolación fue su designación como embajador de Canadá ante Alemania y la Unión Europea. México, por su parte, también hizo lo suyo, a su manera.

La vieja política del compadrazgo, que en esta ocasión puso en el puesto de Canciller a Videragay, fue un intento de adaptación, si bien en este caso no hizo más que aminorar a un gobierno ya de por sí debilitado por su improvisación crónica.

Interactuar con “el Donald” equivale a atragantarse un curso intensivo de diplomacia, guerra y paz. Por lo tanto, Videragay, que llegó “a aprender”, debe estar bien contento con la suerte que le ha tocado. ¡Saldrá hecho todo un erudito en relaciones internacionales este canciller Mexicano!

Pero no exageremos: no todo es impredecible. El intento por frenar la implementación de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio (Obamacare), por ejemplo, era de esperar.

Son 60 votos los que la Cámara de Representantes ha emitido, a lo largo de los últimos años, para anularla. Y si bien ahora los Republicanos no tienen la menor idea de qué hacer en este tema, es una posición tradicional del partido oponérsele y tratar de derogarla.

También era de esperar que Trump, como Bush, restableciera la prohibición, ideada por Reagan, de financiar ONG’s a favor del aborto (y que Clinton y Obama habían eliminado).

No es tampoco raro que se congelen temporalmente las contratos en el Gobierno Federal, ni que se revisen las decisiones que Obama tomó antes de acabar. Los conservadores siempre desconfían del Estado y de su aparato burocrático.




Varios de los decretos ejecutivos, sin embargo se convirtieron en coordenadas que indican, sin lugar a dudas, la existencia de una dimensión desconocida. Primero, la luz verde para construir el muro en la frontera entre México y Estados Unidos, merece nuestra atención. Seamos honestos: ya existe alguna forma de barrera en gran parte de la frontera, y eso desde hace años.

El problema es firmar el decreto cuando el canciller mexicano estaba en Washington preparando una visita del presidente Peña Nieto, continuar afirmando públicamente que México pagaría el muro de una forma u otra, le guste o no, confirmar los planes de deportación masiva de inmigrantes sin papeles, ordenar la publicación de una lista semanal de los crímenes cometidos por inmigrantes, y crear incertidumbre al sugerir gravar importaciones y/o remesas para pagar el muro.

¡Todo eso en 48 horas! Añádase a la lista la intención de renegociar el Tratado de Libre Comercio (TLCAN), buscando un pacto respetuoso para Estados Unidos (porque la víctima es Washington), y señalar que la negativa de México de pagar el muro no haría más que agrandar su tamaño.

Los Republicanos nunca fueron reconocidos por su elegancia y multilateralismo , pero esto es franca provocación. ¿Queda claro por qué no sólo los mexicanos, sino el mundo entero, perciben que México ha sido humillado?

Segundo, la suspensión del programa de refugiados y el veto a la entrada de ciudadanos de siete países (Irak, Irán, Libia, Siria, Somalia, Sudán, y Yemen) ha mostrado ser explosiva. Finalmente, un juez, quien tampoco escapó a los insultos del Presidente, interrumpió una medida que, más allá de su ilegalidad o inconstitucionalidad, resalta por ser inhumana y discriminatoria.

El problema inmediato fue la inseguridad jurídica creada por la confusión. Personas con visas válidas, con Green Cards, o con doble nacionalidad, fueron detenidas durante el fin de semana del 28 y 29 de enero de 2017.




En la semana siguiente, líneas aéreas rechazaron pasajeros en los puntos de embarque que podían generar problemas a su llegada. Tan solo 48 horas después de la firma del decreto, los procuradores generales de California, Connecticut, Hawái, Illinois, Iowa, Maine, Maryland, Massachusetts, Nueva York, Nuevo México, Pennsylvania, Oregon, Vermont, Virginia, Washington, Washington DC publicaron un comunicado condenándolo.

Cuatro jueces (Brooklyn, Boston, Alexandria, y Seattle) emitieron ordenes señalando que quienes poseen una visa válida no pueden ser rechazados en la frontera.

Protestas tuvieron lugar en varios aeropuertos estadounidenses y no pocos abogados ofrecieron servicios gratuitos a las víctimas de estos actos arbitrarios. Hoy, la orden ejecutiva no está rigiendo, pero ya se anunció una batalla judicial al respecto.

El 21 de enero, una marcha contra la misoginia, pero también en defensa de los derechos reproductivos, a la igualdad y a la protección de las minorías latina y musulmana, congregó a miles de manifestantes, que llenaron 1.6 kilómetros.

Fiel a su marca de comercio – Trump siempre se presentó como un político no tradicional – el Presidente se preguntó por qué los manifestantes no habían votado (como si no hubiera perdido el voto popular por casi tres millones).

La inconformidad no es porque el candidato incumpla sus promesas, sino porque puede cumplirlas. La lógica del electorado estadounidense fue peligrosa: es fanfarronería, se dijo, pues al asumir, el sistema lo moderará.

También se afirmó que el sistema estadounidense lo detendría, como si la democracia se tratara de elegir líderes irresponsables para luego contenerlos a toda costa.

En la realidad alternativa en la que se nos ha obligado a vivir, el Presidente de la supuesta democracia más poderosa del mundo – siempre he tenido mis dudas al respecto – inspira terror; un líder comunista defiende el libre comercio mientras que un conservador republicano saca a Estados Unidos del Acuerdo Transpacífico de Libre Comercio (TTP); un vecino incómodo parece amenazar con invadir al vecino pobre. Lo grave no es especular, sino el hecho que no se pueda descartar que de verdad haya sucedido. La incertidumbre en esta realidad alternativa es elevada.

México no está preparado para enfrentar a Trump. Pero Canadá tampoco lo está. Los (supuestamente acalorados) intercambios con Turnbull, Primer Ministro australiano muestran que nadie sabe cómo enfrentar al hombre naranja.

En esta realidad alternativa, el olfato político de Trudeau puede valer lo mismo que la incompetencia de Peña Nieto. Ya ha indicado el Primer Ministro que Canadá recibirá a los inmigrantes que Estados Unidos rechace, lo que lo convierte en un blanco ideal de los insultos de Trump.

En algún momento me pasó por la mente hacer un esfuerzo consciente  para ignorar al  Trump. La mejor táctica es no alimentar ese ego. Pero aquí estoy, apenas dos semanas después de su juramento como Presidente, haciendo exactamente lo contrario.

Lo acepto: la realidad alternativa me ganó. Como intelectual, estoy convencido que es mi responsabilidad unir mi voz para contribuir a contener esta amenaza. Hacer otra cosa es irresponsable e inconsciente. ¿No es extraño que ahora Arnold Schwarzenegger y Kim Jong-un se perciban ahora, de un momento a otro, como chicos casi decentes?

Bienvenidos a la era Trump.

Fernando A. Chinchilla

Cholula (México), enero de 2016

______________________________

– “Todos los puntos de vista son a título personal y no representan la opinión de Altavoz México o sus miembros.”